ZARAGOZA |El Real Zaragoza rasca un empate del Ciutat de València en un encuentro que pudo ganar en la recta final. Igualó fuerzas Escribá tras el descanso con Bebé y Azón y Bermejo puso las tablas con un disparo sobresaliente desde la frontal del área. El conjunto aragonés encontró sentido a su partido en las transiciones ofensivas, la verticalidad y el carácter de su frente de ataque. Supo ir de cara y casi se topa de bruces con una victoria de prestigio.
Cristian Álvarez (7’5): En la oscuridad, él siempre brilla. Y en Valencia lo volvió a hacer. Salvó un primer tanto de Iborra en la jugada inmediatamente anterior al tanto de Montiel y nada pudo hacer en el gol del ‘20’ granota. Salvó tres ocasiones de mucho peligro y sostuvo al Real Zaragoza en momentos de fragilidad.
Fran Gámez (6): El planteamiento del Levante le alegró la noche y el lateral la rubricó su partido con una actuación sin demasiado ruido, pero solvente. Ni Álex Muñoz ni Campaña le exigieron y, ni por esas, se dejó ver en ataque. Se apunta la asistencia, aunque de escaso mérito.
Lluís López (5’5): No tuvo gran incidencia con balón Soldado, al margen de un disparo que estrelló en el larguero, pero sufrió como pocas veces esta temporada el catalán con cada movimiento del veterano delantero. Quizás le faltó la solidez de las últimas semanas, pero volvió a firmar un encuentro sin errores individuales, algo que no pueden decir otros. Ahora mismo, debe ser indiscutible.
Jair Amador (3): Iborra le sonrojó en el gol del Levante y el ‘3’ blanquillo quedó, de nuevo, señalado en su vuelta a la titularidad. Le costó lidiar con los balones a la espalda y sufrió puntualmente con De Frutos.
Carlos Nieto (6): Deslucido en ataque, le ganó el duelo individual a De Frutos en defensa. En la línea de las últimas semanas, no dispuso de demasiadas ayudas, pero neutralizó bien al rápido y vertical extremo levantinista. Un día más, Nieto demuestra que está recuperado para la causa. En el lateral izquierdo poco debate debería haber.
Francho Serrano (6´5): Le faltó viveza y capacidad de reacción en el gol de Montiel, pero fue entonándose con el paso de los minutos. Superó líneas en conducción y su precisión en el pase se convirtió en oxígeno para el Real Zaragoza. No se dejó ver en ataque, pero jugó a varias alturas y se hizo grande ante Campaña y Pepelu, con lo que eso significa.
Tomás Alarcón (2): Naufragó y casi condiciona el partido del Real Zaragoza per se. Escribá lo sustituyó en el minuto 40 después de que el colegiado le perdonara la expulsión en dos ocasiones. Con balón, fallón, sin ritmo ni ideas. No supo limpiar la salida de balón desde la base del pivote y ensució el juego de un equipo que, con él, se descompone.
Alberto Zapater (5): No tuvo un encuentro fácil y Alarcón se encargó de complicárselo todavía más. Pecó de bonachón y no se reveló ante la situación en la medular. Escribá lo reemplazó en el segundo acto.
Sergio Bermejo (6’5): Hoy sí acertó en la toma de decisiones y coronó su buena segunda parte con un latigazo al palo largo. Tras el descanso, abandonó la banda y, entre líneas, fue indetectable para el doble pivote valenciano. Dejó huella en el partido tras una primera parte insuficiente.
Miguel Puche (3): Trabajó en la presión, sucumbió en la banda y se marchó tras el descanso. Su esfuerzo no lo camufla todo y sus carencias técnicas volvieron a aparecer. Escaso para una delantera tan carente de colmillo.
Giuliano Simeone (4’5): Erró un mano a mano en la segunda parte tras un partido de carreras sin premio. Mejoró con Azón de socio, pero no acertó en su plan de partido. Inadvertido como pocos días.
Cambios del Real Zaragoza:
Valentín Vada (2): Jugó 14 minutos: reemplazó a Alarcón en el 40’ y en el 54’ se marchó lesionado por Bebé. Entró tocado, algo que Escribá no sabía, y no aportó nada más que una carrera inicial que Álex Muñoz paró con falta. Nada de nada.
Iván Azón (5’5): Liberó a Giuliano y mejoró al equipo. Fijó a los centrales, igualó el duelo físico y un remate, nada más entrar, se quedó cerca de significar el empate. Acabó fatigado fruto del esfuerzo. Un motivo para creer, al menos.
Jaume Grau (5): Se convirtió en la ayuda que Nieto no tuvo de Bebé y el Real Zaragoza creció tras su entrada. Se cargó con una amarilla y abarcó terreno. Con balón, errático.
Larrazábal (SC):
Entrenador:
Fran Escribá (5): No acertó de inicio, pero supo darle la vuelta. Aunque resulta incomprensible que siga apostando por Alarcón y Vada, hoy sí encontró soluciones de peso en el banquillo. Modificó el esquema y el Real Zaragoza mejoró. Por fin, perfiló a Bermejo hacia una posición más natural para él y gracias a ello el equipo, entre líneas, rebasó al trivote de Calleja. En rueda de prensa más de lo mismo: “El equipo no entendió el plan de partido”.