Formigal es un destino muy popular para los amantes del esquí. La famosa estación cuenta con todo lo necesario para la práctica de los deportes de invierno donde la nieve es la auténtica protagonista. Sin embargo, además de esquiar, hay otras opciones para los turistas interesados en venir a la zona a pasar unos días de vacaciones
Formigal es una de las mayores estaciones de esquí en España, se ubica en los Pirineos, situada concretamente en el municipio oscense de Sallent de Gállego, entre los parajes de Valle de Tena y del puerto del Somport, en la frontera con Francia. En el municipio de Sallent de Gállego, además de su naturaleza y estación de esquí se puede visitar la iglesia gótica de Nuestra Señora de la Asunción y un puente de piedra del siglo XVI. Al sur, Lacuniacha es un parque natural arbolado, en el que es fácil encontrar una espectacular y variada fauna silvestre, como renos, bisontes, lobos, ciervos, gamos, linces boreales, osos…
La estación de Formigal
Sin lugar a dudas, el mayor atractivo turístico y por el que es conocido Formigal a nivel nacional e Internacional son sus instalaciones para practicar deportes en la nieve. Esta estación permite disfrutar de una excelente infraestructura para el Esquí en Formigal, formando parte del grupo Aramón, junto a la estación de esquí de Cerler y Panticosa, en Huesca, y Javalambre y Valdelinares en Teruel.
Las pistas de esquí Formigal suman un total de 141 kilómetros esquiables y cuenta con un desnivel de casi 750 metros. Dispone de hasta 101 pistas, las cuales se dividen de la siguiente manera: 6 pistas verdes, 19 pistas azules, 34 pistas rojas, 38 pistas negras y 4 itinerarios. Es el lugar perfecto para esquiadores con experiencia, pero también para aquellos que se inician en la práctica, pues se adaptan a todos los niveles. Cuenta, además, con 22 remontes: 6 telesillas, 6 telesquí, 5 telesillas de pinza fija y 5 alfombras.
También conocida como estación de esquí Formigal-Panticosa, ofrece unos preciosos circuitos de esquí de fondo y uno de los mejores balnearios de Europa. Es una de las estaciones que más han crecido en los últimos años no solo en tamaño, sino también en calidad.
Su ubicación en un enclave privilegiado, hace que la estación de esquí de Formigal ofrezca varias opciones para disfrutar de los Pirineos y del Valle del Tena sin tener que recorrer grandes distancias en coche.
Sallent de Gállego, junto a Formigal
Sallent de Gállego es el pueblo más cercano a Formigal, a tan solo 4 km de la estación de esquí. Se trata de la capital del valle de Tena y se localiza al pie de la peña Foratata. Tan solo 11 km lo separan de Francia. Se trata de un pueblo muy visitado por los esquiadores, pero bien merece una visita en cualquier época del año, aunque no se sea aficionado a los deportes de invierno.
Pasear por sus calles empedradas es un auténtico viaje de vuelta atrás en el tiempo. El río que recorre el pueblo deja a su paso muchos puentes, alguno que datan de la época medieval.
Es un pueblo de piedra donde el toque de color lo ponen las flores de los balcones y ventanas. En el patio del edificio del Ayuntamiento se puede ver la estatua de Fermín Arrudi, conocido gigante de Sallent y que a finales del siglo XX llegó a medir nada menos que 2,29m. Fue muy conocido y viajó por muchos países enseñando su altura y fuerza.
Destaca en este pueblo su iglesia, uno de sus edificios más emblemáticos, dedicada a Nuestra Señora de la Asunción. Está ubicada en la zona más alta del pueblo y es de estilo gótico tardío (siglo XVI). Fue restaurada en la década de los 90.
No obstante, el pueblo de Sallent no solo ofrece un paseo tranquilo por sus calles, sino que es punto de partida de numerosas rutas, como la que nos lleva por el sendero natural del embalse de Lanuza o las que nos conducen a lagos pirenaicos, como el de Respomuso.
Desde el embarcadero Suscalar, si el clima lo permite, se pueden realizar diferentes actividades en el embalse de Lanuza, como hidropedales, piragua, paddel surf… un plan estupendo para realizar en pareja, con la familia o amigos.
Por último, destaca el Spa Aguas Limpias, llamado como el río que cruza el pueblo, un balneario urbano en el que el acceso está permito tanto a adultos como a niños.
Otras visitas de interés
Esta zona está llena de grandes tesoros por descubrir. Otra visita recomendable es la población de Panticosa, que ofrece rutas de senderismo o un paseo por las pasarelas sobre el río Caldarés. Se trata de unos pasos colgantes que miden unos 800 metros de longitud y que no dejan indiferente a nadie. Destaca el balneario de Panticosa, muy conocido en la zona y al que también se puede acceder con niños.
En realidad, toda la zona del Valle de Tena, en la que se encuentra enclavado Formigal, ofrece al turista una amplia oferta cultural, deportiva y de naturaleza, tanto en invierno como en verano. Merecen ser destacados los pueblos pintorescos de Biescas, El Pueyo de Jaca, Hoz de Jaca, Lanuza, Tramacastilla de Tena o Piedrafita de Jaca.