El de este domingo en El Salto Caballo, que enfrentará a CD Toledo y SD Huesca, no será un partido cualquiera para tres futbolistas del cuadro castellano-manchego: Pepe Aicart, Rubén Garcés y Joaquín Sorribas se enfrentarán al que fuese su equipo hasta hace bien poco. De especial trascendencia será para estos dos últimos, ya que se trata del club de sus orígenes, el que les dio la oportunidad de labrarse una carrera en el fútbol español.
Pepe Aicart con la camiseta azulgrana | Foto: sporthuesca.comJosé “Pepe” Aicart llegó a la capital del Alto Aragón en verano de 2013 de la mano de Pablo Alfaro, procedente del CD Leganés, que había disputado la temporada anterior la fase de ascenso a Segunda División. Canterano del Albacete, aunque nacido en Madrid, el barbudo Aicart jugó también en las categorías inferiores del Celta, Pontevedra y Gandía. A pesar de ser un fijo en el centro del campo del Huesca (33 partidos y 3 goles) para los tres técnicos que pasaron por el banquillo azulgrana la convulsionada pasada temporada, el madrileño hizo las maletas en el pasado mercado estival alegando “problemas personales”, como manifestó en la entrevista concedida a SPORTHUESCA, y fichó por el Toledo. A las órdenes del mítico Josip Visnijic, Aicart se mantiene como titular indiscutible en el conjunto toledano, donde desde su llegada ha disputado un total de 21 partidos y ha hecho 2 tantos.
Rubén Garcés | Foto: sporthuesca.com – C.PascualRubén Garcés, con tan solo 21 años, también llegó el pasado verano a la Ciudad Imperial tras no llegar a un acuerdo con la SD Huesca para la renovación de su contrato. Nacido en la capital altoaragonesa, “Garci” puede presumir de ser uno de los pocos canteranos que han conseguido debutar con el primer equipo azulgrana, haciéndolo éste además en Segunda División y como titular ante el FC Cartagena. La pasada temporada, ya en Segunda ‘B’, disputó un total de 20 partidos de liga, enfundándose el brazalete de capitán en la 10ª jornada ante el Peña Sport. En esta reciente campaña, Garcés, que ha actuado tanto de central como en los dos laterales, ha jugado 13 partidos hasta el momento, en los que ha visto una cartulina roja en la 14ª jornada contra el Bilbao Athletic. Además, se ha perdido los dos últimos partidos de la competición, ante Sestao y Real Sociedad ‘B’, por lesión.
Pero el caso del futbolista que emigró a Toledo más conocido por los seguidores oscenses es sin duda el de Joaquín Sorribas, el “eterno capitán” de la SD Huesca. Natural de Abella (Huesca), Sorribas debutó con el primer equipo a mediados de los 90 y, tras el descenso a Tercera, jugó en Valencia ‘B’, Binéfar, Real Zaragoza ‘B’, UD Almería, Ceuta, Real Unión y Burgos. En 2006 regresó al club de sus orígenes, al que en dos temporadas logró llevar a la categoría de plata del fútbol nacional. Desde entonces, y hasta su marcha hacia Castilla-La Mancha en verano de 2013, “Sorri” ha disputado 90 partidos de Segunda División con el conjunto azulgrana, más 8 de Copa del Rey. Sus relaciones con el conjunto aragonés están bastante tensas actualmente tras la denuncia que interpuso el futbolista por impagos, pero en la retina de todos los aficionados oscenses todavía perdura la imagen del jugador con más temporadas en la historia del Huesca, dejándose la piel por su escudo sobre el césped de El Alcoraz.
Se tratará de un partido especial sin duda alguna para los tres, si bien el grado de importancia aumenta en el caso de Garcés y Sorribas, ya que la SD Huesca es el club donde se formaron como futbolistas y que les ha dado la oportunidad de seguir dándole patadas a un balón lejos de la capital altoaragonesa.
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