HUESCA | Patrick Soko no ha recuperado la chispa desde que estuvo lesionado y el Huesca necesita al futbolista camerunés para poder soñar con el ascenso. En Burgos jugó su peor partido de la temporada y fue sustituido en el minuto 64. Una sensación que queda corroborada por los datos. Fue el partido de la temporada en el que menos kilómetros recorrió. Es el choque que menos sprints completó de todo el curso. Y también fue el que menos carreras de alta intensidad hizo en toda la campaña.
En El Plantío no le salieron ninguno de los dos regates que intentó, no tiró a puerta y solo disputó la mitad de los balones divididos. No fue el día de Soko, pero Hidalgo quiere recuperar al futbolista para los ocho últimos partidos de la temprada. El africano es el jugador más desequilibrante que tiene el Huesca y el técnico también sabe que tiene que favorecer el juego para que pueda lucir su estrella. En El Alcoraz lo normal es que vuelva a jugar Soko junto con Sergi Enrich y no como única referencia.
La lesión de Soko en el Huesca
Soko se lesionó la semana en la que el Huesca viajó a Tenerife y desde entonces no ha vuelto a ser el mismo, aunque le marcó un tanto al Sporting de Gijón. Se perdió el partido del Heliodoro, luego frente al Levante tampoco pudo participar, no viajó con la selección de Camerún y volvió sin brillo ante el Eibar. En los ocho últimos partidos puede volver a deslumbrar como delantero. Ocho encuentros que le pueden servir para firmar el contrato de su vida si le acompañan los goles y que al Huesca le pueden hacer cumplir el sueño del tercer ascenso a la máxima categoría.
