Al sur de Navarra, entre la abrumadora aridez de las Bardenas y el verde intenso de la huerta de la Ribera, se encuentra Tudela, la segunda ciudad en extensión e importancia del territorio foral. En esas condiciones se asienta un proyecto rugbístico de mucho mérito y 23 años de lucha pese a las dificultades de desarrollar un deporte minoritario en zonas no tan pobladas como las grandes urbes.
El sábado, a los oscenses les tocaba batirse el cobre en Pomar con los Gigantes de Navarra, un equipo al que se visitó en la primera vuelta y que ya demostró que no regalarían ni un solo punto. En un día de ambiente y clima excepcional, con jornada de escuelitas Quebranta y partido S16 y S18 contra el CDRU Zaragoza, el Quebranta tenía que demostrar que el equipo estaba madurando y empezar a mostrar la evolución en su juego estructurado.
El partido comenzó con un susto para el quebrantahuesos, después de varios fallos encadenados que un Vili muy activo durante todo el partido se encargó de solucionar. Primer minuto, primer susto. Lejos de minar la confianza de los jugadores barbatuenses, este hecho les hizo despertar de la clásica pájara quebranta de los primeros 10 minutos y reaccionaron con un ensayo en el minuto 4, a cargo de Robben. El marcador fue sumando puntos, algunos de ellos de bella factura como un maul de más de 20 metros, finalizado por Undertaker, pero el partido estaba lejos de tenerlo controlado el QRC ya que al minuto 18 se quedaba con 14 jugadores por un placaje de Vili merecedor de tarjeta amarilla. Fueron 10 minutos que hubo que trabajar codo con codo y apretar defensivamente. Un buen ejemplo del hambre local se vió en el minuto 40, donde después de recibir el balón de una patada rival y sabiendo que el tiempo estaba cumplido, los jugadores quebrantas siguieron atacando hasta lograr un nuevo ensayo.
En el segundo tiempo llegaron los cambios, que dieron descanso a una primera línea muy castigada por el pack navarro, y a una tercera cortina que ganaba en experiencia acumulada por los años por parte de Héctor Pomposo. El juego se destacó por una melé quebranta que sufría mucho en las melés, pero muy superior en maul y touch, donde el foncense Ferrer consiguió robarles la cartera repetidas veces a los saltadores tudelanos. En juego abierto, se empezaba a ver estructura de juego, que permitía generar espacios mayoritariamente aprovechados por el montisonense Andrés Vilalta “Vili” para superar la defensa rival. Mención especial para Andrés que acabó el partido con 6 ensayos en su haber.
Como aspectos positivos, la delantera mostró unas fases estáticas muy trabajadas, y un mejor posicionamiento en el juego abierto, que facilitó mucho el trabajo a la bisagra. Por su parte el literano Adrián Manero “Rojo” y Gabi de la Fuente empiezan a entenderse y a leer el juego de una forma más acertada. Ello ayuda a dar pasos en la dirección de controlar mejor los partidos (algo que aún no se consigue), y que le obliga a ir a remolque en muchas fases del partido.
Finalmente, pero no menos importante, es de agradecer todo el esfuerzo dedicado por los voluntarios durante toda la jornada de rugby y al público asistente al partido, (en especial al equipo femenino) que llevaron en volandas al Quebranta hasta la victoria una vez más.
FICHA TÉCNICA
Ensayaron: Robben (2), Vili (6), Undertaker (4), Grumpy y Jon.
Transformaron: Aitor (5), Angel Perez (6).
Equipo inicial: Grumpy, Hater, Dueso, Ferrer, NoelNo, Mathieu, Heko, Undertaker, Rojo, Gabi, Vili, Robben, Saban, Budason y Lolo. También jugaron Jon, Aitor, Quilez, Calcio, Pomposo, Reverga y Satán.
Premios: 1 punto Jon; 2 puntos Vili ; 3 puntos Angel; Teletubbie: Vili. Premio HPHQEC a la delantera navarra por hacer sudar sangre a los quebrantas durante todo el partido.