Acabó la serie de semifinales entre Burgos y Huesca, y los entrenadores, Diego Epifanio por Burgos y Quim Costa por Huesca, hacían balance del último partido, de la serie y de la temporada, dejando algunas puntualizaciones a tener en cuenta tanto en un lado como en el otro.
Un molesto Diego Epifanio llegaba a la rueda de prensa felicitando a Peñas Huesca por la victoria, la serie realizada, la afición y el trabajo hecho a lo largo de la temporada por el equipo, pero haciendo bastante hincapié en aspectos que le habían molestado tanto en el partido como en su estancia en Huesca, a pesar de que le quitaba hierro al asunto, pero insistiendo en sus comentarios, con aspectos poco éticos por parte del club oscense, en dos factores como fueron según el entrenador burgalés el encendido de luces de uno de los coches de publicidad en el cuarto partido durante el lanzamiento de unos tiros libres, razón por la cual Diego Epifanio se metió en la pista en medio del partido, y el supuesto espionaje por parte del cuerpo técnico de Peñas Huesca en uno de los entrenamientos que Burgos realizó en la capital oscense.
Se mostraba satisfecho no obstante por la temporada de Burgos y la tercera posición cosechada en liga regular, así como del trabajo de sus jugadores, haciendo una reseña en que habían echado en falta la participación tanto de Rafa Huertas como de Matija Poscic en la eliminatoria sobretodo en el aspecto defensivo, dos jugadores de mucha importancia en el club.
Acababa deseando suerte a Peñas Huesca, siendo capaz de ganar a cualquiera jugando con esta intensidad y el nivel que está mostrando, así como reseñando en varias ocasiones que el equipo oscense había sido mejor en la pista y era merecedor del 3-1, destacando la experiencia de Quim Costa en el banquillo altoaragonés.
Quim Costa satisfecho
El entrenador catalán de Peñas Huesca llegaba contento a la rueda de prensa, mostrando la satisfacción de que un equipo con el objetivo de no descender había llegado a la final de LEB Oro. Catalogaba el encuentro como típico de una semifinal donde se jugaban el pase a la final, con un encuentro muy duro con mucho contacto que el equipo había sabido asimilar, con algo que ha ido aprendiendo con el paso de la temporada.
Satisfecho con la afición, la que catalogaba de fundamental cuando Burgos se había ido de 9 puntos en el marcador, así como en los momentos de despegue del equipo hacia la victoria al que llevaba en volandas. Consideraba determinante el aspecto mental en sus jugadores, cosechado tras la derrota del primer partido, gracias a la ambición que se ha tenido a lo largo de toda la serie.
Sobre las quejas de Diego Epifanio comentaba desconocer lo referente a las luces del coche, dado que no lo había visto y alegando no tener nada que ver con el equipo y su equipo técnico, no obstante esperando ver el video para ver si era verdad lo comentado. Acerca del supuesto espionaje, mencionó que durante su estancia en Burgos, en todas las sesiones realizadas tanto en El Plantío como en un pabellón aledaño donde se realizaron sesiones de tiro y otras tácticas, había siempre gente por el graderío viendo el entrenamiento, algo que en ningún caso mencionó Quim Costa en ruedas de prensa anteriores, restando importancia a este aspecto comentado por el técnico burgalés.
Sobre el partido de Gabas Maldunas, a pesar de no ser un jugador que deba de sobreslir sobre el resto, destacó su buen hacer reboteando, corriendo y defendiendo, que es lo que pide el entrenador catalán del lituano, remarcando que gracias a sus rebotes ofensivos nos había podido mantener en el partido. Acerca de Christian Díaz dijo que tenía una peculiar forma de ver el baloncesto, con momentos álgidos de inspiración, que ya había mostrado en el tercer partido y que había vuelto a enseñar con algunas canastas inverosímiles que habían permitido a Peñas Huesca recuperar la ventaja y luego ampliar la misma, nombrando no obstante que el trabajo de todos los jugadores había sido importantísimo para la victoria.
Con respecto a su preferencia con Melilla y Coruña no tenía ningún equipo preferido deportivamente hablando, pero si que comentaba que logísticamente el viaje a Melilla era mejor, dado que Coruña son 12 horas de autobús, y su espalda no está para esos trotes. También mencionaba sobre el aspecto físico de que el rival juegue un quinto partido, diciendo que es importante en estas alturas de la temporada el equipo pueda descansar más y llegue mejor físicamente, esperando que ello se note en la próxima eliminatoria.
La involucración y el compromiso del equipo fue remarcado, donde solamente Jorge Lafuente tenía un sentimiento con respecto al club al inicio de temporada, y a día de hoy el espíritu de equipo lo tienen todos como se puede ver en la cancha destacando un día uno y otro día otro, sintiéndose todos importantes, un Quim Costa que antes de ser despedido entre aplausos anunciaba que desde el mismo lunes por la mañana ya iba a ver vídeos del partido y de los rivales con afán de mejorar, sin tomarse ni un día de descanso.
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Pues qué decir de la actitud, palabras y actuación de Quim. Ya estaba todo explicado, es así en realidad y su gran experiencia es un tesoro para el club.
Este año se ha podido hacer una piña en el vestuario, los jugadores han respondido satisfactoriamente a las indicaciones y exigencias del míster y entre todos se ha conseguido la situación actual de bienestar, que espero todavía no de euforia. Todo llegará, pero no hemos acabado la temporada y todavía se ha de redondear.
Hay que descansar, importante físicamente, pero más aún psicológicamente un par de días o tres. A partir de aquí, volver a centrarse, rearmarse y centrarse igual que en esta última ronda.
El míster y su cuerpo técnico no descansan, su cabeza ya está en la siguiente ronda analizando la otra eliminatoria y estudiando al rival con detenimiento. Trabajo bien hecho, a conciencia, y dle todo correcto.
¡Qué alegría cuando se hacen bien las cosas y ayudan los resultados!
Sigamos, esto no ha acabado.