Comentaba Morales en el post partido que el Levante había dominado el partido pero que estaban jugando ante un rival que había aprovechado las ocasiones. Es raro escuchar que la SD Huesca ha aprovechado las pocas oportunidades de las que ha dispuesto. Suele ser al revés. Muchas ocasiones, pero poco gol. Por suerte, el equipo tiene a un tal Rafa Mir que se encarga de invocar la lluvia en medio de una sequía goleadora.
Aun así, el delantero azulgrana tira de humildad, de mentalidad grupal: “Son dos goles más. Yo estoy contento por el resultado que hemos logrado para el equipo. Necesitábamos una victoria como esta. La permanencia no pasa por mis goles, pasa por el trabajo de todos; por el trabajo de los once titulares, de aquellos que salen, del resto del equipo y del cuerpo técnico. La permanencia pasa por toda la gente que trabaja en este club”.
No era un partido fácil, ante un rival que había concedido muy poco en el Ciutat de València y que solo había perdido tres de los últimos doce partidos. Aun así, los de Pacheta lograron romper con las predicciones. “Ha sido una victoria muy importante. Hoy ha sido la primera final y el equipo ha competido a un gran nivel. Ahora ya toca pensar en la siguiente”, analizaba el murciano.
“Si antes creíamos, imagínate ahora”
Todo ello es “una recompensa al trabajo realizado en las últimas jornadas” donde el equipo “merecía mucho más de los resultados obtenidos”. Hoy, la SD Huesca dormirá a un punto de la salvación y, por ello: “Vemos la salvación cada vez más cerca”.
Y es que las últimas palabras de Rafa Mir lo dicen todo. Transmiten emoción, confianza y sed de sangre, de poder lograr algo único. “Cuando estábamos peor ya confiábamos en poder lograrlo, así que imagínate ahora”, concluía el delantero del Huesca.