Por fin se confirma el culebrón de invierno y Raúl Guti es nuevo jugador del Real Zaragoza. Después de un mes de enero lleno de noticias acerca del futuro del canterano, finalmente en el último día de mercado se ha oficializado su llegada.
Que se puede decir de Guti que no se haya dicho ya. Si se lleva especulando sobre su llegada un mes. Si no hay ningún zaragocista que no conozca a Raúl Guti. El que fue heredero de Zapater anterior a Francho y que tuvo que marcharse de la forma más trágica posible. Tras perder un ascenso casi cantado en enero, y por el equipo que nos arrebató el último halo de esperanza. Pero ya lo advirtió en su despedida. No era un adiós, sino un hasta luego. Tres años y medio después, Raúl Guti ha cumplido su promesa.
El Real Zaragoza estaba necesitado de centrocampistas y el regreso de Raúl Guti encajaba como anillo al dedo. Más cuando no contaba para Beccacece. Once participaciones y solo cuatro titularidades. Su participación ha ido de más a menos a lo largo de su etapa en Elche. Fue clave en la salvación en su primera temporada, pero tras ella, no volvió a contar con tantos minutos hasta llegar al ostracismo en el que se encuentra. Sus últimos partidos no hacen recordarlo al jugador que fue en Zaragoza, pero reencontrarse con el contexto que le hizo brillar puede ser clave para su recuperación.
Pese a su pobre participación esta temporada, el jugador seguía contando con mucho cartel. Cordero ha tenido que pelear con varios equipos para lograr traer a Raúl Guti. El líder de la categoría, el Leganés, tuvo en mente -incluso más cerca- la llegada del centrocampista para mejorar su plantilla. En Zaragoza se une a un centro del campo corto, donde Guti, Moya, Grau y Aguado se disputan tres puestos entre ellos.