La pretemporada del Real Zaragoza de Jim ilusionó. Pese a no contar con todos los mimbres, el nivel fue impresionante, dando esperanzas de cara a una nueva temporada. Sin embargo, el arranque ha estado muy lejos de lo soñado. Con un empate y dos derrotas, el equipo es penúltimo. En esta cuarta jornada, el rival será el último. Un duelo directo para salir del pozo cuanto antes y mirar el futuro con mayor optimismo.
“Más que urgencia, lo que hay es ganas de ganar de una vez después de este arranque sin victorias. Tenemos que evitar las prisas. Sigo convencido de que tengo un equipo súper competitivo. Así me lo han transmitido tanto en los entrenamientos como en el terreno de juego”, defendía el alicantino.
Por ello, el entrenador ha asegurado con no habrá “una revolución en el once” porque “el equipo está jugando bien y merece continuidad”. Aun así, “puede que haya algún cambio para buscar algún enfoque diferente pero no será un cambio total”. En cuanto a la posibilidad de devolver a Narváez a la posición de delantero centro, Jim ha argumentado que tiene “total libertad” en este Real Zaragoza y que tan solo hay que verlo sobre el campo para apreciar la variedad de ocasiones que crea.
El conjunto zaragozano tiene la gran oportunidad de romper esta mala racha y empezar a construir un futuro mejor. Y qué mejor manera de hacerlo que a costa de otro equipo que naufraga por Segunda con tres de tres en derrotas. Somos conscientes de que el inicio del Alcorcón no ha sido bueno pero han tenido rivales muy complicados. Es un rival que juega muy intenso y tendremos que controlar cada segunda jugada para evitar sorpresas. El Zaragoza no se puede permitir ningún lujo, sea cual sea el rival“, concluía Jim.