El del sábado será el octavo duelo entre Huesca y Córdoba en El Alcoraz. Hasta el momento, 3 victorias locales, otras 3 visitantes y un único empate. Un choque histórico entre ambos desde que comparten la categoría de plata.
No se le da del todo mal al Córdoba jugar en El Alcoraz. De sus siete visitas previas ha sacado 10 puntos de los 21 que ha disputado, es decir, casi un 50%. No obstante, al contrario que antaño, ahora la situación es bien distinta, ya que es el Huesca el equipo que domina la categoría y el Córdoba el que lo ve desde el farolillo rojo, y es que 17 puntos separan a ambos contendientes.
En la primera visita blanquiverde, en noviembre de 2008, el Huesca venció 3-1 gracias al doblete de Rubén Castro y al gol de Roberto. Por parte andaluza, Pierini hizo el gol del honor en los últimos 15 minutos de partido. Tras un empate a 0 en la 2009/10, el Huesca volvió a ganar (2-0) al cuadro califal en 2011 con un tanto de Tariq y otro de Luis Helguera. Hasta esa temporada, las visitas del Córdoba solo se saldaron con 1 punto de los 9 jugados.
Pero a partir de ahí cambió. En los 3 siguientes Huesca-Córdoba, los puntos volaron para el sur. En la 2011/12 anotó Patiño el tanto de la victoria y en la temporada siguiente, la del descenso azulgrana, un doblete de Fede Vico y un gol de Pedro sirvieron para remontar el gol inicial del ex azulgrana Carlos Diogo.
Tras esa temporada y el paso por Segunda División ‘B’ del Huesca y la travesía en Primera División del Córdoba, ambos clubes volvieron a cruzar sus caminos en la campaña 2015/16. Un gol de Florín y otro de Xisco fueron suficientes para llevarse los puntos de El Alcoraz. En aquel momento, Anquela ya ocupaba el banquillo azulgrana.
Por último, el curso pasado se dio el mejor precedente para la escuadra oscense en su estadio frente a los blanquiverdes. El Huesca arrolló al Córdoba (3-0) en la jornada 4 y fijó la primera goleada de una temporada histórica. Ferreiro encarriló el partido en el minuto 4, Samu Sáiz lo puso de cara antes del descanso y Aguilera puso la guinda en los minutos finales del encuentro.