HUESCA | Lo único bueno, puestos a buscar algo positivo de la derrota del Bada Huesca sobre el 40×20 de Puente Genil, es que Ignacio Suárez ya está de vuelta. El partido se torció pronto, al menos los síntomas de que no iba a ser una buena noche para los altoaragoneses. Tras la segunda parada de Arguillas, Keita chocó con una rodilla de Arguillas y tuvo que salir Casterad bajo palos y la primera al canterano paró con el pecho. Era una buena noticia. Jugar con el tercer portero ante un siete con tipos como Arsenashvilli, Cuenca o Ribeiro no era un horizonte próspero. En la otra costa, De Hita. El exHuesca es un veterano en esto del balonmano, que sigue viendo la trayectoria del la redonda cuando enfila a su portería. Y eso implicó que sacara muchas, demasiadas.
En ataque, los cordobeses tuvieron en la conexión central-pivote el argumento perfecto para meter goles. El Bada tuvo que salvar el 5:1 para que Cordiés y Mosquera obligaran a De hita a coger el balón de las redes. Con 4-4 regresó Arguillas bajo palos. Y llegó una mala noticia para el Bada: Malo falló un 7 metros en la frontera de los 10 primeros minutos de juego. El segundo, jugada siguiente, gol. Pero esta no iba a ser la noche del central.
El problema del Bada en el primer acto estaba en el ataque. Perdió varios balones y Puente Genil corrió. Y sí, puedes frenar alguno, pero lo lógico es que se abran diferencias en el electrónico. Con 10-7 y 13 minutos jugados paró el reloj Nolasco. Puente Genil hilvanó sus ataques con goles. Hizo daño con el pivote, encontró huecos para lanzar desde los 6 metros, Aizen marcaba desde los 9 metros armando su zurda a la carrera y a la contra. Así, el 16-9 en el electrónico era reflejo de lo que ocurría sobre el 40×20.
Nolasco volvió a parar el reloj. El 18-10, tras 22 minutos de juego, era como un puñetazo al mentón producto de una defensa de cartón piedra. Bada dejó el 6:0, puso a Danylo en el pivote para atacar, a Óscar por Malo y en el primer ataque de los pontoneros, exclusión de Gucek. El siete altoaragonés se refugió en Óscar García e Ignacio Suárez, pero los andaluces no sufrían; les bastó con intercambiar goles.
El segundo acto empezó con una pronta exclusión de Rodrigo Benites al picar los árbitros en la simulación de Ribeiro que dio a entender que el brasileño le placó en la cara. No fue la única decisión protestada, tampoco era excusa para entender la diferencia en el electrónico. Y es que el Bada se caía por la defensa, uno de sus puntales y colisionaba contra los porteros de Puente Genil. Y cuando al rival le sale todo y a uno no nada no queda otra que reconocerlo y arriar la bandera.
Ficha técnica
Puente Genil: De Hita (p), Keita (3), Aizen (8), Ribeiro (4), Arsenhasvili (7), Boskos (3), Cuenca (3). Siete inicial. Tekaya (ps), Silva, Cabello (1), Medina (1), Bernabéu (4), Sousa (1), Jung (1), Janosli (7).
Bada Huesca: Arguillas(p), Adrià Pérez (1), Cordiés (2), Rodrigo Benites (4), Gucek, Mosquera (7), Ian Moya (2). Siete inicial. Casterad (ps), Óscar García (1), Ignacio Suárez (9), Malo (6), Danylo, Floris, Acosta, Samuel Alejandro.
Parciales cada cinco minutos: 2-2, 5-4, 10-8, 15-9, 20-12, 23-15 (descanso) 28-22, 31-23, 35-25, 36-27, 39-30, 43-32.
Árbitros: Martín-Álvarez. Excluidos Arsenashvili, Silva, Sousa por el Puente Genil; Mosquera, Gucek, Rodrigo Benites, Acosta, Samuel Alejandro por Bada Huesca.