El Real Zaragoza continúa negado en su estadio en el que no gana desde la primera jornada de Liga, tras perder por 0-2 ante el Cádiz. El conjunto gaditano ha vuelto a evidenciar las carencias de un equipo aragonés que sigue sin levantar cabeza a pesar del cambio de entrenador.
Lucas Alcaraz ha variado de sistema de juego, de jugadores y de posiciones de estos desde que llegó pero nada ha funcionado y sigue acumulando malos resultados porque su equipo no consigue llegar en ataque a los dominios rivales con solvencia y atrás los fallos que comete acaban casi siempre en gol.
El conjunto maño, como ha ocurrido en la mayoría de los últimos encuentros que ha jugado, encajó frente al Cádiz un gol en la primera parte y le tocó ir a remolque sin dar síntomas de tener claras las ideas para superar a un equipo bien colocado, con una excelente presión y que cada vez que engarzaba una contra metía el miedo en el cuerpo a los propietarios del terreno.
El Real Zaragoza comenzó el encuentro de manera diferente a como lo había hecho en los últimos, con más ritmo, dominado el balón y abriendo a bandas para intentar penetrar o centrar desde ahí ante un agazapado Cádiz, pero fueron fuegos de artificio porque apenas duraron diez minutos pues los visitantes equilibraron el juego a partir de entonces.
Aún así el equipo maño, por medio de Marc Gual, tuvo la primera oportunidad en un potente remate en el minuto 13 aunque fue demasiado centrado y permitió al meta Alberto Cifuentes rechazarlo. Sin embargo, toda la pólvora local acabó ahí contrariamente a lo que ocurrió con el conjunto gaditano que, en el segundo remate que realizó a puerta, se adelantó en el marcador.
Un centro de Salvi Sánchez por la derecha en el minuto 21, tras una contra amarilla que venía de un saque de esquina local, fue intentado rematar en boca de gol por Manu Vallejo pero lo hizo de manera defectuosa y el esférico acabó en Dejan Lekic que, sólo, anotó tras dar el balón previamente en el poste.
El gol reforzó la confianza de un Cádiz que la tiene por las nubes y aumentó los miedos y las dudas de un Real Zaragoza que era un continuo querer y no poder porque apenas podía superar la línea de presión foránea, salvo en una postrera ocasión al filo del descanso en la que, de nuevo, el meta Cifuentes le sacó un buen remate raso junto al poste a Marc Gual.
Antes, en el minuto 29, le fue anulado un gol de Salvi Sánchez al Cádiz por fuera de juego que casi podía haber dejado sentenciada la contienda visto lo que estaba ocurriendo en el terreno de juego.
Tras el descanso el conjunto de Lucas Alcaraz porfió por empatar pero seguía sin ser capaz de superar el entramado andaluz que apenas sufría con las acciones de ataque ‘blanquillas’ y los cambios tampoco funcionaron.
El Cádiz se encontraba cómodo ante la ineficacia local y con la presión que realizaba ahogaba las ideas del rival. Además, de cuando en cuando, intentaba alguna contra como había ocurrido en los primeros 45 minutos.
El equipo de Álvaro Cervera tuvo el 0-2 en el minuto 79 en un contragolpe con pase de David Carmona a Lekic pero el cancerbero zaragocista le tapó el disparo en el mano a mano que se produjo entre ambos.
En el añadido (min.91), Álvaro Vázquez, en prácticamente la única oportunidad local tras el descanso, intentó colar un balón por entre las piernas del guardameta visitante pero Cifuentes reaccionó a tiempo para evitar el empate.
Ficha técnica:
0 – R. Zaragoza: Cristian Álvarez; Alberto Benito, Delmás, Perone, Nieto, Aguirre (Raúl Guti, min.65); Eguaras, James (Álvaro Vázquez, min.53), Pep Biel; Pombo (Soro, min.77) y Marc Gual.
1 – Cádiz CF: Cifuentes; Rober Correa, Marcos Mauro, Sergio Sánchez, Brian Oliván; Garrido, Álex Fernández (Edu Ramos, min.74); Salvi Sánchez (Carmona, min.40), Vallejo (Aketxe, min.86), Jairo; y Lekic.
Goles: 0-1. min.22. Lekic.
Arbitro: Areces Franco (Comité Asturiano). Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Eguaras, Perone, Nieto y Aguirre y a los visitantes Carmona y Sergio Sánchez.
Incidencias: partido correspondiente a la decimosexta jornada de Liga disputado en el estadio de La Romareda de Zaragoza ante 17.950. espectadores. EFE