Era lógico agitar el vestuario del Huesca, buscar la fórmula adecuada para cambiar el rumbo. El parón de las selecciones le tenía que venir bien el bloque. Una semana para pensar y la siguiente para reactivarse con otro jefe en la cabina de mando. Francisco ha llegado al Huesca para que el equipo parta otra vez desde el pantalán con buen rumbo. Que habrá olas inmensas como decía Leo Franco está claro. No hay que engañarse. La temporada va a ser un sufrimiento y jornadas como la de hoy son un ejemplo más. .
Había lógica expectación por la primera propuesta de juego del técnico almeriense y por ver a Rubi en el banquillo visitante. Nunca se sabrá cómo sería ahora la historia, pero qué bueno hubiera sido que quien lideró el ascenso hubiera seguido una temporada más. Y el técnico andaluz decidió ir al ataque. Contra el Espanyol al asalto de la zona noble de la Liga gracias al pinchazo del Real Madrid contra el Levante, el Huesca puso de inicio a sus dos puntas contra el equipo de Rubi, fiel a su estilo 4-3-3 y con una plantilla que da argumentos para hacer una buena campaña. Tras la victoria, segundo.
Las primeras notas que tocó este Huesca dejaron a un grupo más competitivo, con cierta fiereza para recuperar balones y con Moi más liberado para ordenar y mandar. El Huesca salió a buscar al rival, pero atrás dejó ciertos síntomas de fragilidad ante un Espanyol que, al menos, no estaba en esos momentos de dulce. Gallar fue el primero en probar a Diego López en el 16. Demasiado centrada y a córner. Longo, cuatro minutos después, lanzó rasa y el portero la blocó junto al palo derecho. Nos obstante, las ocasiones eran escasas y a falta de calidad hubo músculo. Los últimos minutos del primer acto se embarraron. Y de repente, Didac entró por el lateral izquierdo y Borja Iglesias tan solo la tuvo que empujar. Hubo suspense por aquello del VAR, pero se apagó. Un 0-1 que deja, desafortunadamente, que cuando al Huesca le agujerean la portería, la vida se complica.
El segundo acto se abrió con Melero por Cucho para dejar a Longo en punta y al capitán de enganche. El objetivo era adueñarse del cuero para crear más y mejor. El VAR hará mucho por el fútbol, pero le quita mucha salsa. La intriga llegó a los cuatro minutos de arrancar. Era tan dudosa la jugada que le hubiera dado el segundo tanto al Espanyol que de esta forma van a acabar con la vida de algún hipertenso. Más que con champán hay que empezar los festejos con gaseosa. Pero la jugada deslizó la fragilidad defensiva del Huesca y eso no era bueno ante un rival con oficio.
Francisco busco la verticalidad metiendo a Ferreiro por Gallar que no tuvo su tarde salvo los esperanzadores primeros diez minutos del encuentro. El gallego se puso por la banda izquierda y el ‘Chimy’ Ávila por la derecha. El Espanyol se puso el traje de mecánico ante un Huesca que tenía en Ferreiro al agitador, pero siempre con dos rivales encima. El problema llegó con un robo de balón de los de Rubi. Contra de manual y Borja Iglesias la clavó cuando mejor estaba el Huesca. Y es que sigue romo, ha ofrecido empuje, más por empeño y rasmia que por calidad, y cuando el rival la tiene lo mata.
La losa del resultado era gruesa. El partido casi se acabó. Los de Francisco estuvieron ya partidos. Costaba cerrar ante un Espanyol que ni forzó la máquina porque no lo necesitaba. Hubo 9 minutos de más, pero daba igual. El Espanyol supo cómo desactivar cada ataque sin pasar apuros. Tan solo Ferreiro, quién si no, amenazó cuando el partido moría. La derrota pudo ser más dolorosa. Una falta de Hermoso botada al borde del área se fue al larguero.
FICHA TÉCNICA
SD Huesca: Jovanovic; Miramón, Pulido, Semedo, Akapo; ‘Chimy’ Ávila, Musto (Gurler 73’), Moi, Gallar (Ferreiro 57’); Longo y Cucho (Melero 46’).
RCD Espanyol: Diego López; Javi López, David López, Hermoso, Didac; Marc Roca, Granero, Víctor Sánchez; Hernán Pérez (Piatti 67′), Borja Iglesias (Melendo 86′) y Sergio García (Batistao 74′).
Arbitro: Prieto Iglesias. Amarilla Granero 38’, Musto 57’, ‘Chimy’ Ávila 67’, Hermoso 67’, Didac 72’, Miramón 95′.
Goles: 0-1 Borja Iglesias min.41. 0-2 Borja Iglesias 64’.
Incidencias: partido disputado en El Alcoraz con unos 7.000 aficionados en las gradas. Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de quien fuera presidente del Huesca Joaquín Sarvisé.