Como si fuera una serpiente, el Barça está en plena mutación de su piel. La continuidad de Messi, la irrupción de Pedri, la reivindicación de Dembelé, si Griezmann da lo que se espera de él, que si mantiene la seguridad de Ter Stegen, que si Busquet está más en operación salida que lo que uno quiera. La realidad es que este Barça no es el de antes. Antes no perdonaba, ahora sí.
El Barça ha podido noquear al Huesca en el primer acto y haberse ido a la Ciudad Condal con un empate pese a todo el caudal de ocasiones que ha creado. Que aún así es un buen equipo nadie lo duda, que Messi lo deja al alcance de muy pocos, también. Con la misma severidad de que el argentino está sobre el campo, pero no como antes.
Míchel retocó su once inicial respecto al de otros partidos. Dejó a Pulido la banda derecha de la defensa con Siovas e Insua de pareja de centrales y Galán para bailar con Messi, que arrancó el partido por esa banda y luego jugó por donde le dio la gana. La referencia en ataque de los altoaragoneses fue Rafa Mir, con Sergio Gómez y Ontiveros en los costados.
Álvaro salvador
A los 6 minutos, Álvaro ya sacó un balón de oro. Acumulando gente por el centro, el Barça creó vía Jordi Alba, un balón que deja pasar Braithwaite y Pedri que no logra colarla a bocarrajo. Ni un minuto después fue Messi quien falló algo que parecía imposible… siendo Messi. No eran buenas noticias para el Huesca que le caía una tormenta de juego con Jordi Alba al que no podía sujetar Pulido por la banda derecha.
El Huesca tejió un sistema defensivo de muy pocos metros entre líneas, apelotonamiento y solidaridad contra un Barça que buscó su ruptura con paredes y moviendo rápido la bola. Los de Koeman se sintieron cómodos. Y cuando el Huesca tuvo la posesión y el Barça se la robó aplicó una endiablada velocidad para llegar con peligro, siempre, a los dominios de Álvaro.
Con un sistema defensivo desplegado sobre su campo, cada ataque del Huesca era una quimera. Todo un mundo para llegar al área de Ter Stegen y la confianza de que Rafa Mir, con su zancada pudiera desmontar a Lenglet o Araújo. La lata la abrió el Barça vía Messi que puso con su zurda y desde la izquierda un balón de oro a De Jong al que no pudieron frenar ni Galán ni Seoane para que rematara en el área pequeña. Un toquecito de calidad para batir a Álvaro, muchos minutos por delante y el temor en los locales a que el Barça aplicara el rodillo.
Ocasión de Messi
El portero del Huesca frenó a Messi, que en el 40 se fabricó una falta con una entradita de Mir. Tres pasitos atrás, golpeo a la escuadra derecha y Álvaro que vuela para despejarla a córner. Dos minutos, después los mismos protagonistas. En esta ocasión, por encima del larguero. El primer acto se cerró con la sensación de que la única incógnita por resolver era de por cuánto iba a ganar el Barça. Y es que Ter Stegen ni cogió el balón con sus guantes con lo que el ataque del Huesca era absolutamente romo y el Barça había acumulado ocasiones claras para ir con más diferencia que el exiguo 1-0.
Contra otro equipo y con ese resultado es más posible que hubiera un plan B para el segundo acto. La impresión es que Míchel no tuvo otro o no pudo aplicarlo, porque todo parecía un calco. O peor aún. El Huesca cada vez más encajonado ante un Barça que con muy poco encerraba a un Huesca atrincherado, con temor a dejarle metros. Lo mejor era el resultado y el deseo pillar una contra. Y la tuvo sin llegar al minuto 55. Rico subió la bola y no vio a Sergio Gómez por su derecha. Se la puso a Rafa Mir y el Barça desactivó el peligro.
Taconazo de Mir que pudo dar el empate
Aún pudo empatar el Huesca. Un córner y Rafa Mir que la toca de tacón entre una maraña de piernas para que Ter Stegen la blocara de forma milagrosa. El juego del Barça estaba con cierto somnífero. Estaba tan confortable encerrando al Huesca que se descuidó y permitió el arañazo de los de Míchel, que perfectamente pudo ser un zarpazo.
Con la solitaria diferencia y 20 minutos para terminar, el Huesca hizo un triple cambio. Entraron Okazaki, Juan Carlos y Ferreiro por Pulido, Seoane y Sergio Gómez para buscar ese gol, un empate de más valor que lo que hubiera significado el punto en la tabla. Los cambios dieron más protagonismo al Huesca que salió de su cueva, que pudo fabricar el empate, pero que facturó una derrota más que previsible.
Ficha Técnica
SD Huesca: Álvaro Fernández; Pulido (Juan Carlos 72’), Insua, Siovas, Galán; Mosquera, Rico (Doumbia 64’), Seoane (Ferreiro 72’); Sergio Gómez (Okazaki 72’), Rafa Mir, Ontiveros.
FC Barcelona: Ter Stegen; Jordi Alba, Lenglet, Araújo, Dest (Mingueta 74’); Pedri, Busquets (Pjanic 74’), De Jong; Dembelé, Braithwait (Griezman 80’), Messi.
Goles: 1-0 min. 26 De Jong.
Árbitro: Guillermo Cuadra Fernández. Amarilla Ontiveros 83’, Míchel 87’