‘Morir por la cima’ es el libro de Carlos Suárez donde te aproxima a cómo siente la montaña. Algo ha llovido desde que este madrileño viera en ellas un mundo de libertad, de desafíos y de retos. Un tipo de esos con los que lo mejor que puedes hacer es sentarte y escuchar. Enamorado de Aragón, su mujer es de Huesca y Riglos fue plató de su álbum de boda, los primeros segundos del libro convertido en documental los abre con unos segundos brutales.. Una escalada por la Vía Murciana y un salto desde esa pared.
8b a los 19 años
Autor de tres libros, artículos en distintas revistas especializadas, saltador BASE, escalador de la mano de Ramón Portilla en sus inicios, con un grado 8b a los 19 años cuando en España pocos lo habían firmado, Riglos vuelve a ser uno de los escenarios de un proyecto goloso. De los que cuando intuyes lo que vas a ver desde un sillón das por sentado que no vas a comer palomitas. Lo más seguro es que te atornilles al sillón, al sofá o al cheslong. La catarata de emociones está preparada. Solo te que queda ver y disfrutar.
Un tipo que a los 17 años destacó con escaladas en solitario al Pilar Bonatti o las Grandes Jorasses de los Alpes solo puede servirte emociones. Y ahora está inmerso en otro proyecto, con Saffe Visión, para dar a conocer templos de la escalada. “Con Jorge Saffie estamos haciendo vídeos de sitios únicos del mundo de la montaña y Riglos es uno de ellos”, señala. Las pruebas de cámara de los mallos pronto se deslizaron por las redes. “La verdad es que ha tenido mucha virilización con cuatro detalles: sus paredes verticales, las vistas…”, explica Suárez.
En esa serie de sitios únicos, otro escenario es La Pedriza, la vía de El Pájaro. Fue una mezcla entre la escalada libre y correr en búsqueda de un tiempo récord. A esas imágenes se sumarán las de distintas expediciones y “la que haremos este verano, seguramente, a Patagonia”, señala. “Lo que pretendemos es captar la belleza de lugares únicos con mi experiencia, digámoslo así, y a través el ojo fotográfico de Saffie”, explica.
Un lugar espectacular
Cuando a Carlos Suárez se le pregunta por Riglos –sus Mallos son el próximo día 8 protagonistas de una competición de escalada durante 12 horas- aguanta unos segundos antes de contestar. “A mí me lo da todo. Me parece uno de los lugares más espectaculares del mundo. La tranquilidad del pueblo, de la gente que vive allí. He escalado allí desde pequeño y lo siento como mi casa”, señala.
