HUESCA | Un punto a favor de los gallegos separa al Cangas de un Bada Huesca que viaja para empezar a escalar posiciones en la clasificación de la ASOBAL. Los de Pontevedra abrieron la liga empatando en la cancha del Valladolid y su única victoria fue contra el Villa de Aranda en su casa. Entre medias derrotas por un gol contra Logroño y Puente Genil y de 7 contra el Barça. Así que, con el histórico de marcadores reciente, el partido de este domingo será complicado para el Bada Huesca que, pese a todo, también ha firmado buenos partidos y solo ha validado la victoria contra León.
El Bada Huesca viaja con 14 jugadores y rotaciones limitadas. Carlos Molina y Bruno García acaban de integrarse en el grupo y necesitan de un tiempo de adaptación a sistemas, aunque seguro que tienen minutos. “No puedo dar muchas rotaciones y eso implica que muchos jugadores se van a cargar de minutos y eso se nota al final del partido. Por hacer un paralelismo, Torrelavega –el anterior partido disputado por el Bada Huesca- jugó los últimos minutos con jugadores top porque pudo administrar los tiempos”, explicó Nolasco.
Cangas, sin miedo a lanzar
El siete altoaragonés ha tenido que reinventar su centro de la defensa y allí tanto Ian Moya como Samuel Cordiés se erigen como potentes argamasas en el 6:0 altoaragonés. Nolasco subraya que Cangas, en su casa, aumenta su “peligrosidad” que se apoya en los lanzamientos de Rares Fodorean, Rubén Río y Brais, el trabajo en el pivote de Sherif y Quintas. “Es un equipo que no tiene miedo a lanzar y que juega a muchos ataques. A nivel defensivo se basa en la dureza de su parte central y estamos preparados para jugar a ese tipo de defensa”, indica el entrenador que recuerda que la portería del Cangas la defiende el zaragozano Jorge Pérez.