HUESCA| Rubén Pulido será titular por novena vez con el Huesca y en el Estadio de La Cerámica quiere aprovechar la oportunidad tras varios intentos fallidos. Sus tres últimas presencias en el once inicial son para olvidar o para aprender. Ante el Eibar en Ipurua hizo un penalti y se marcó un gol en propia puerta, en La Romareda su equipo fue goleado por 3 a 0 y ante el Sporting en El Molinón fue expulsado. Tres experiencias que le han hecho pagar los platos rotos y se ha convertido en un asiduo del banquillo.
El joven defensa madrileño fue una fuerte apuesta durante el pasado verano y llegó al club altoaragonés como el fichaje estrella para la defensa oscense. El Huesca lo fichó desde el Fuenlabrada, que descendió a Primera RFEF pese a la buena temporada del joven central madrileño. Rubén Pulido quiso jugar en el Huesca y la operación se pudo cerrar en los últimos días del mercado, pagando un traspaso al Fuenlabrada.
Ziganda cuidó su puesta a punto y no lo puso en el once hasta que lo vio en perfectas condiciones físicas. Su rendimiento no fue malo, pero en Ipurua y La Romareda tuvo dos malas tardes y Jeremy Blasco consiguió convencer con sus actuaciones al entrenador. “Ha llegado el momento que estaba esperando. Llevo trabajando toda la temporada para aprovechar las oportunidades. Me tocará participar por la sanción de Pulido.”
Central de futuro
Rubén Pulido tiene solo 22 años y su progresión en sus dos primeras temporadas en Segunda con el Fuenlabrada fueron muy notables. En el Huesca tiene dos años más de contrato y Ziganda está formando a un zaguero de garantías para el futuro. “Estoy con muchas ganas de demostrar que estoy preparado y capacitado para jugar. Para los que venimos jugando menos aprovechar los minutos del míster nos viene bien para coger confianza“, explicaba el defensor.
Reaparición en el derbi
Rubén salió desde el banquillo cuando fue expulsado Jorge Pulido y tuvo una buena reaparición: “Mis sensaciones fueron buenas, no es fácil salir a un partido que te pilla de sorpresa y con uno menos. Lo importante era salir enchufado. Los últimos dos partidos que jugué no tuve demasiada suerte y tenía ganas de reivindicarme y demostrar el nivel que puedo dar.“