Se llegó a pensar que la temporada se daría por finalizada, que incluso no habría fútbol hasta el 2021. La espera ha sido larga pero al fin, después del esfuerzo de todos para conseguir la “nueva normalidad”, ha vuelto la liga. Ante la nueva situación, comenzaron las preguntas sobre cómo cambiaría el trascurso de los partidos así como la gestión de las plantillas y hoy, la SD Huesca tenía su primera prueba contra el Málaga.
Una de las partes que más destacó Míchel durante la semana fue ese trabajo incesante de su equipo en la concentración, en mantener la cabeza centrada durante el partido. Y justo fue eso lo que más faltó al conjunto oscense en La Rosaleda. Dos fallos clamorosos, infantiles, que bien pudieron significar una derrota.
Y eso que el partido comenzó con una dinámica totalmente diferente. A los dos minutos del pitido inicial, Ferreiro recogía un centro de Raba para firmar el primer tanto del retorno competitivo y estrenarse como goleador en esta temporada.
La desconcentración total
El Huesca se veía seguro, confiado en territorio enemigo… Pero todo se truncó con una acción imperdonable de Juan Carlos. Tras un córner favorable, el gallego intentó frenar una contra -todavía lejana- de Tete Morente con una entrada por detrás que significó su expulsión por roja directa a los 25 minutos del partido.
A partir de ese momento, los boquerones se hicieron poco a poco con el control del partido aunque llegando a la portería de Yáñez -sorpresa en el once- tímidamente. Entonces, llegó la segunda falta clara de concentración. Un regalo de Josué Sá siendo último hombre en la línea de atrás propició una contra del Málaga que acabó con un penalti de Pedro López sobre el mismo Tete Morente. Moreno Aragón acudió al VAR para confirmarlo y Sadiku no perdonó.
Con empate a uno en el marcador, los azulgranas se mostraban perdidos sobre el terreno de juego, sin timón. Sin embargo, Diego González regaló un penalti totalmente innecesario a los cinco minutos del descuento con un claro codazo en el área a Raba. Tras una nueva comprobación en el VAR, el colegiado no dudó y el propio Raba logró transformar el penalti para hacer un gol que sabía a gloria dadas las circunstancias. La SD Huesca tenía que aguantar ante el Málaga toda una segunda parte con uno menos.
Cambios esperanzadores
Previsiblemente, el conjunto andaluz se convirtió en dueño y señor sobre el terreno de juego. Con la posesión de color blanquiazul, al Huesca solo le quedó defender de manera organizada las llegadas rivales que apenas sorprendían a Yáñez. Mientras tanto, Míchel comenzó a mover fichas desde el banquillo para añadir una mayor solidez y consistencia al equipo con las salidas de Rafa Mir y Luisinho por Raba y Okazaki respectivamente.
Entonces, a los 13 minutos, ocurrió otro hecho que volvió a cambiar las tornas del encuentro. Lombán arrolló al ex del Wolverhampton con una segada que, aunque en la repetición quedó dudosa, el colegiado no dudó en mostrarle la tarjeta roja. El partido volvía a igualarse en número de jugadores y los azulgranas podían respirar un poco más. Ya no había excusas, la SD Huesca tenía que aguantar el resultado y llevarse los tres puntos contra el Málaga.
Sin duda, la salida de Rafa Mir cambió el partido y no solo por la expulsión forzada, sino también por la revolución que supuso en el ataque. Su recompensa llegaría en el minuto 80 con un remate de cabeza en el córner sacado por Ferreiro. En los instantes finales, Doukouré hizo su debut con la camiseta azulgrana y dejó buenos toques de calidad en la salida del balón. Con 1-3 en el electrónico, el aficionado azulgrana respiraba y más pudo hacerlo cuando el colegiado señaló el final del partido.
Durante las últimas semanas, los jugadores del Huesca insistieron en la importancia que residía en ganar en la vuelta a la competición. Con los tres puntos logrados en La Rosaleda, el conjunto de Míchel se coloca momentáneamente a tan solo dos puntos del ascenso directo marcado por el Real Zaragoza y a tres del Cádiz, líder de Segunda.
Ficha técnica
Málaga CF: Munir; Cifu, Lombán, González (Boussefiane, 46′), Juankar; Muñoz (Jaime, 87′), Bare, Juanpi, Adrián (Villanueva, 69′), Tete (Santos, 69′); Sadiku (Buenacasa, 69′).
SD Huesca: Yáñez; Pedro López, Pulido, Josué Sá, Galán (Doukouré, 84′); Mosquera, Mikel Rico (Eugeni, 71′), Juan Carlos; Ferreiro (Gómez, 84′), Raba (Rafa Mir, 53′), Okazaki (Luisinho, 53′).
Goles: 0-1, Ferreiro (min. 2); 1-1, Sadiku (min. 42); 1-2, Raba (min. 45+10)
Árbitro: Moreno Aragón amonestó a Ferreiro (13′), Pulido (32′), González (45+9′), Galán (54′), Mir (70′). Roja a Juan Carlos (26′); Lombán (57′).