Tranquilidad contra presión, placer contra obligación… Será un partido muy extraño. La Tercera División Aragonesa ha tenido -y está teniendo- una temporada repleta de emoción y rivalidad. El nuevo formato de la RFEF ha servido de incentivo para que muchos clubes intenten dar ese importante paso hacia la Segunda División RFEF. El CD Teruel ha sido el primero en lograrlo, y el CD Brea intentará seguir su camino a falta de dos jornadas para poder obtener esa plaza directa, ocupada ahora mismo por la SD Huesca B.
“Quizá este formato era más justo que una eliminatoria donde puede pasar cualquier cosa. En un campeonato como este, se premia al que ha sido más constante y nosotros hemos sabido hacerlo“, reflexionaba Víctor Bravo en Sportaragon. Es cierto, los turolenses han mantenido una regularidad digna de alabar a lo largo de toda la campaña y, a falta de dos jornadas, los deberes ya están hechos.
Una situación de infarto
El entrenador aragonés aprovechará estos dos últimos partidos para dar minutos a aquellos que no han disfrutado de tanto y, sobre todo, a terminar la competición de la manera más digna posible. Asegurar el liderato de la Tercera División Aragonesa debería ser una motivación suficiente; sin embargo, ¿será suficiente para competir contra un equipo que necesita sí o sí la victoria?
Ante el CD Teruel, espera un CD Brea preparado para la batalla, para lograr lo que ya consiguieron en la ida. El conjunto zaragozano logró imponerse por 2 a 1 en su campo retrasando lo que podría haber sido un ascenso muy temprano de los turolenses. Ahora mismo, el Brea está a tres puntos de la SD Huesca B, contra el que tendrán el último enfrentamiento de esta fase. Si los de Aranda no suman y el filial azulgrana sí lo hace contra el Utebo -aunque sea un empate- estos últimos firmarán el ascenso. Por ello, el equipo no quiere riesgos e irá a por todas dejando esa última jornada con todo en juego.