El último día del mercado estival de fichajes, a escasos minutos del cierre del mismo, la SD Huesca oficializaba la incorporación de Sandro. Desde entonces, pese a haber disputado poco más de 500′ y haber tenido varias lesiones musculares que le han apartado del equipo, ya ha dejado muchas acciones de calidad, buenos números y sensaciones. Fue una de las sensaciones en el último partido y anotó saliendo del banquillo, dejando detalles muy interesantes sobre el verde.
La temporada 15/16, tras su fichaje por el Málaga, fue la mejor de su carrera profesional. 16 goles y 5 asistencias le valieron un viaje a Liverpool, donde el Everton apostó por él tras pagar 6 millones de euros al conjunto andaluz.
Desde entonces comenzó su periplo de cesiones infructuosas por España tras no triunfar en la Premier. Sevilla, Real Sociedad o Valladolid han sido sus destinos, aunque sus temporadas han sido mucho menos fructíferas que la presente.
4160′ repartidos en 101 encuentros después, llegó a Huesca con solo 5 goles y 6 asistencias en 4 temporadas. Unos números muy alejados del Sandro joven y brillante que despuntó en el Málaga y ganó una Champions con el Barcelona.
Un presente dulce
Pero si por algo se ha caracterizado siempre la SD Huesca es por ser el club idóneo para relanzar carreras, y con la de Sandro no está siendo menos. Vino aquí con mucho cartel, siendo un desembolso económico importante por parte del club en cuanto a salario y con mucho que demostrar, pero con el potencial de renacer y volver a ser el jugador que fue en su día.
Nada más debutar, a los pocos segundos, ya anotó su primer tanto. Fue su ex equipo, el Valladolid, el que lo sufrió. Ahí cuajó su mejor temporada desde que dejó el Málaga (3 goles y una asistencia), igualando a la actual. Para lograrlo, eso sí, empeló casi el triple de minutos de los que ha necesitando este año.
A día de hoy, completamente recuperado de su lesión, Sandro se postula como uno de los héroes necesarios en la carrera por la permanencia. Y es que desde que llegó al conjunto oscense, el canario genera un gol cada 120′ aproximadamente, o lo que es casi lo mismo: uno cada partido y medio. A este ritmo y jugando todo lo que queda de temporada, acabaría la temporada con más de 13 anotaciones generadas, entre goles y asistencias.
Esto le haría ser uno de los delanteros españoles más en forma del campeonato, le acercaría al rendimiento de su mágico año en Málaga y, sobre todo, sería una certeza casi matemática de que el año que viene la SD Huesca y él competirían de la mano en Primera División.