No ha sido un verano fácil para Manolo Sanlúcar, tras su llegada al CD Ebro, el andaluz vio cómo su plantilla se mermaba por momentos: “Ha sido duro, hemos tenido bastantes contratiempos y hemos llegado a estar entrenando con siete jugadores. Pero bueno, ya ha pasado y ahora, al comienzo de liga, llegamos preparados. Tenemos muchas ganas”, analizaba.
El equipo y el cuerpo técnico ha experimentado un lavado de cara: “Somos un equipo nuevo y necesitamos afianzar la confianza entre todos nosotros. Tengo la certeza de que lo haremos. Una vez lo hagamos, podremos cumplir con los objetivos marcados y mejorar nuestro fútbol”.
Pese a todo el sufrimiento, Sanlúcar se muestra positivo con el CD Ebro: “Mi objetivo es crear un equipo fuerte, con una idea de juego y con una plantilla unida. Una vez consigamos eso, ya veremos a dónde podemos llegar en la clasificación. Mi filosofía es pareja a la del club, tenemos muchas ganas e ilusión por crecer; si los dos ponemos de nuestra parte, puede ser una gran temporada.
Arranque de valientes
El primero de los rivales será el Olot, un equipo “complicadísimo” que ha mantenido equipo y “tiene las ideas muy claras”. Para el entrenador del conjunto zaragozano, la regularidad de los catalanes jugará a su favor, pero el Ebro tiene otra arma: “Nosotros estamos todavía buscando los automatismos que nos den seguridad tanto en defensa como en ataque. Eso ellos ya lo tienen. Sin embargo, nuestra situación también puede convertirse en una ventaja para poder sorprenderles en el juego“, explicaba el andaluz.
La motivación esta muy presente en la plantilla del CD Ebro pero Sanlúcar mantiene los pies sobre el suelo: “Olet será complicada, sí. Pero es que la semana que viene jugamos contra el Espanyol B, que también lo es. Esta es la Segunda B y esta va a ser siempre la dinámica. Cada semana vamos a tener que darlo todo y hacer las cosas muy bien”.