Roberto Santamaría explicaba tras el empate del Huesca en Anoeta que “veníamos a un campo muy complicado contra un equipo enrachado. Hemos sabido leer muy bien el partido. Nos llevamos un punto que no nos sirve para mucho pero nos tiene que dar ese pelín de confianza; que nos sirva para creer un poquito más. El equipo está vivo“.
Francisco alineaba una defensa de cinco hombres (tres centrales y dos carrileros) en lo que suponía un nuevo cambio de sistema. “Durante la semana se trabajan muchas variantes. Es un sistema que el míster también trabaja y el equipo ha estado muy junto. Quizás ha sido el partido más serio defensivamente“, indicaba el portero azulgrana al respecto.
La Real Sociedad ha tenido el balón la mayor parte del tiempo, algo que no por ello ha inquietado al Huesca ni le ha impedido generar peligro. “No hemos tenido la posesión de la Real ni de otros partidos, pero las dos ocasiones más claras han sido nuestras, el palo de Yangel y la parada de Rulli a Cucho”, comentaba Santamaría, que añadía que “quizás por ocasiones claras nos hayamos merecido algo más“.
“En la segunda parte hemos tenido que aguantar sus embestidas”
Santamaría sí reconocía que “en la segunda parte, por momentos, hemos tenido que aguantar sus embestidas”. Sin embargo, le ha gustado el rendimiento ofrecido por el cuadro oscense.
Y es que “conseguir por primera vez la portería a cero” y “puntuar fuera de casa después de tantísimo tiempo”, como ha recordado el meta navarro, tiene que dar “un poquito de alegría y optimismo“. No califica de final el partido frente al Valladolid aunque matiza que “es muy importante porque es en casa, ante nuestra gente y para refrendar el punto conseguido hoy”.