ZARAGOZA | El pasado viernes, en el empate del Real Zaragoza en el Stage Front Stadium, Santiago Mouriño firmó uno de sus mejores partidos como blanquillo hasta la fecha. Intenso y acertado en los duelos (salió victorioso en siete de ocho), desesperó a un Martin Braithwaite que se chocó una y otra vez contra él. Con el balón, buscó en todo momento el pase progresivo y contribuyó a que el conjunto maño, por momentos, llevase el peso del encuentro.
Desde el inicio de temporada, al zaguero uruguayo le ha costado entrar en el once titular. De hecho, con Fran Escribá en el banquillo, solamente lo hizo en cinco ocasiones, una de ellas en Copa del Rey. Sin embargo, parece que Julio Velázquez ha decidido apostar por él y permitirle demostrar que tiene las condiciones necesarias para ser importante en los planes de este nuevo Real Zaragoza. Y es que, desde el cambio de dibujo del 1-4-4-2 al 1-5-4-1 (1-3-3-3-1 en ataque), el defensor charrúa ha elevado de manera exponencial su rendimiento. Es cierto que solamente acumula dos buenas actuaciones de manera consecutiva, pero hay que decir que, en estas dos jornadas, hemos visto a un Santiago Mouriño más sólido y solvente. Quizás el sistema lo potencie, sí, pero también es importante destacar la capacidad del jugador propiedad del Atlético de Madrid para darle la vuelta a una situación deportiva complicada. Y es que, hace apenas un mes, parecía tener pie y medio lejos de la capital del Ebro. Actualmente, la situación es totalmente distinta, ya que el montevideano es uno de los recuperados de Velázquez y una de las claves para entender este buen funcionamiento del nuevo dibujo.
La indispensabilidad de Jair, en entredicho
La otra cara de la moneda es Jair Amador, cuyo rendimiento está muy alejado del que mantuvo en el arranque de competición. Y es que el zaguero luso-caboverdiano, pese a ser un perfil muy útil para este equipo en el juego aéreo, está mostrando ciertas carencias en con y sin balón. En salida de balón, jamás ha destacado, pero, sin él, ya no es aquel jugador imperial en los duelos que nos encandiló en el inicio de temporada.
Es evidente que el estado de forma de los futbolistas cambia constantemente, pero la realidad es que el excentral de la SD Huesca atraviesa por un mal momento deportivo. Si bien es cierto que sigue siendo indiscutible para los intereses maños, ahora mismo, no parece descabellado imaginarse un Real Zaragoza sin la presencia de Jair Amador en el once. No obstante, Julio Velázquez sigue apostando firmemente por el portugués, que ha demostrado en numerosas ocasiones que es un buen central para la categoría de plata. Ahora, la pelota está en su tejado, ya que no hay mejor sitio para disipar las dudas sobre un futbolista que en un terreno de juego. Por ello, es el momento de que Jair vuelva a ser el Jair de siempre.