El Huesca se despide de El Alcoraz con una derrota que le aleja del objetivo de liderar la Segunda División. Ahora le tocará ganar en Oviedo y que no venza el Rayo en la última jornada. La fiesta del ascenso sigue tras el partido. || FOTOS DEL PARTIDO.
Qué distinto debe ser jugar un partido cuando sabes que estás en Primera. Qué sensaciones debe sentir el aficionado al saber que la próxima temporada en El Alcoraz buscarán los tres puntos en juego tipos de talla mundial. Qué extraño es enfocar un partido desde la grada cuando el cuerpo técnico que te ha llevado a la cima volverá la próxima temporada como rival. Qué raro plantear un encuentro desde el banquillo cuando (casi) no has entrenado y en el deporte profesional todo se mide al milímetro. Y qué emoción es que el invitado a la fiesta, a la despedida del equipo de la Segunda sobre su verde se sume a la fiesta y haga el pasillo en señal de respeto y reconozca así el éxito de la temporada.
El Huesca ha cerrado su semana más imperial contra un Nàstic acuciado por no caer al precipicio. Rubi descargó sobre el prado un once con pocas novedades respecto al patrón marcado durante la temporada. Las principales novedades fueron las de Akapo por Alexander en la banda derecha y la de Sastre por Aguilera por delante de la defensa. Ninguna concesión. Y es que acabar líder de Segunda es goloso por lo emocional –el título- y por lo económico -400.000 euros- por acabarla como líder. Rubi no ahorró nada. Se fue a por el partido porque fiestas aparte, el objetivo es el título y queda aún que jugar contra el Oviedo de Anquela.
El encuentro se pintó distinto al de cualquier otro de la temporada. Especialmente por la fiesta en la que vive la SD Huesca desde que se consiguió el ascenso y que siguió con un espectáculo de luz y sonido al término del partido. El Nàstic pronto sufrió el juego del líder con un Melero dando otra clase de fútbol, ‘Chimy’ presionando y el equipo percutiendo como sabe para hacerse dueño del balón. En medio de ese fútbol control surgió el argentino para meter una rabona que si la cuela se cae el estadio.
El Huesca fue apelotonando ocasiones ante Dimitrievski. El partido entró en esa fase donde tan solo faltaba el gol con una grada pasándolo de lujo con el fútbol desplegado por los de Rubi. El único problema es que el empate del Huesca y el gol del Rayo dejaron a los de Vallecas en el liderato cuando la jornada –la de hoy ha sido con todos los partidos a la misma hora como será la próxima- se acercaba a poner el final del primer acto.
El Nàstic arrancó la segunda parte en la zona de descenso. Eso le obligó a cambiar su planteamiento. El puntito que en ese momento gestionaba le servía de nada por lo que le tocó arriesgar, dar un paso adelante. Salió con menos rigidez, necesitado de marcar y ganar por lo que dejó la puerta abierta. Era cuestión de aprovechar el momento y Gallar tuvo la primera. Rubi abrió ese segundo acto con Rulo por Brezancic y más intenciones de cambios desde la banda.
El Nàstic movió ficha por partida doble y puso sobre el prado a Uche y Cardoso para meter más mordiente arriba. de hecho, Barreiro la tuvo de cabeza con sus 191 centímetros, aunque el balón se fue por encima del larguero. Dominaba el Huesca, pero los catalanes dejaban sensaciones de que podían llegar. El ingreso de Cardoso y Uche le dio más profundidad ante un Huesca que se alargó mucho, y el nigeriano metió un gol de oro a pase de Abraham muy protestado por los oscenses, que se saldó con amarillas para Pulido y Matilla.
El tanto era vida para los tarraconenses que casi le dejó en Segunda. Tocó remontar con 15 minutos por delante y Rubi quitó a Gallar y puso a Ferreiro para seguir con el mismo objetivo. El partido se afeó con la roja justa de Akapo que entró de forma aparatosa a Tejera cuando el partido ya entraba en sus últimos minutos. La emoción estaba más en las filas del Nàstic que jugó en descenso, en la salvación (casi) matemática y con el temor a que un gol de Huesca lo pusiera en el precipicio del descenso.
Ficha técnica
SD Huesca: Remiro; Akapo, Jair, Pulido, Brezancic (Rulo 45’); Melero, Sastre (Camacho 81′); Gallar (Ferreiro 76′), Moi, ‘Chimy’ Ávila; Cucho.
Nàstic: Dimitrievski; Otar, Molina, Pleguezuelo, Abraham; Jan Luc (Cardoso 57’), Matilla, Márquez (Uche 57’), Álvaro (Fali 74′); Barreiro y Tejera.
Goles: 0-1 Uche min. 71.
Árbitro: Sagués Oscoz. Amarilla a Molina 10’, Sastre 41’, Remiro 68′, Pulido 72, Matilla 72. Roja a Akapo 83′.
Inicidencias: estadio El Alcoraz con 5.261 aficionados en las gradas.