Con el gol de Galán en el descuento, todas las miradas se dirigieron hacia el lateral andaluz que daba un triunfo de infarto para seguir creyendo en el ascenso. Sin embargo, nadie se paró en analizar el buen partido que cosechó Álvaro Fernández dentro de los tres palos, clave en la SD Huesca para hacerse con la victoria.
“Estamos muy felices por haber ganado un partido de tanta importancia como es el derbi aragonés. Fue un punto de inflexión ya que sabíamos que si perdíamos frente al Zaragoza hubiese supuesto el descolgarnos de la lucha por el ascenso directo. Es un golpe moral que tenemos que aprovechar para la recta final”, analizaba el portero azulgrana.
La SD Huesca logró por primera vez en su historia asaltar La Romareda, algo de lo que Álvaro Fernández se siente “muy orgulloso”. Pero para él, todo queda ya en una anécdota que hay que dejar atrás para centrarse en el próximo partido contra Las Palmas: “Toca recargar fuerzas, coger buenas sensaciones y ponernos a punto para el jueves”.
Y es que con la victoria contra el Real Zaragoza, los de Míchel vuelven a creer en el ascenso directo: “Cádiz, Zaragoza y Almería tienen partidos muy complicados y sabemos que se van a dejar puntos por el camino por lo que tenemos que estar nosotros ahí para aprovecharnos”, explicaba el ex del Mónaco.
El guardameta confía en su equipo al que define como “una piña” que va “a muerte con el míster”. Además, ha querido lanzar un mensaje a la afición: “Lo mejor está por llegar y espero que la afición nos siga apoyando. Debemos estar todos unidos, en las buenas y en las malas”, concluía.