Sensaciones, sensaciones y más sensaciones. Sin duda ha sido la palabra de este 2020 desde que comenzó la nueva temporada. Sin embargo, como todo, los argumentos se acaban agotando cuando no hay nada que los respalde. Hoy, al fin, Míchel ha admitido que con las sensaciones, la SD Huesca no puede ir a ningún lado.
Quizá haya sido una de las ruedas de prensa más autocríticas del entrenador madrileño desde que comanda las filas azulgranas. “Hay pequeños detalles que nos están haciendo mucho daño y no estamos sabiendo controlarlos en esta categoría. Ahí, el máximo responsable soy yo; no puedo obviar que hay cosas que se me escapan”, admitía. Por ello, lo tiene claro: “Tengo que buscar soluciones inmediatamente”.
Aún así, ha confesado que no está enfadado con ningún jugador de la plantilla que “lo han dado todo” y de los cuales no hay ninguno que esté “por debajo del nivel del resto de la plantilla”. Además, incide en que ve al equipo “totalmente convencido y motivado de que se puede lograr la permanencia”. Y es que recuerda que el equipo “tan solo ha sido inferior contra el Real Madrid, Real Sociedad y Sevilla”.
Sin sentir inferioridad
Pese a la autocrítica, Míchel ha analizado el partido de la SD Huesca en Vigo con optimismo: “Creo que hasta el 1-0, el partido estaba más para nosotros que para ellos. Los primeros primeros 15 minutos de la segunda parte han sido los peores del equipo porque no hemos sabido gestionar la presión. Sin embargo, los cambios nos han servido para bien porque hemos reaccionado y hemos empezado a recuperar la confianza en ataque. Después, hemos tenido ocasiones suficiente para poder empatar el partido”.
Rubén Blanco, guardameta del conjunto gallego, felicitaba en el post partido al Huesca por el partido realizado, algo que no le gusta nada al entrenador azulgrana. “Tener el reconocimiento después de una derrota, no me gusta nada”, admitía.
El equipo necesita un lavado de cara y convertirse, como el propio Míchel admitía, en lo que se ha convertido el Celta. “Tenemos que convertirnos en un equipo como ellos, cambiar a una mentalidad ganadora para pillar una buena racha y comenzar a remontar en la clasificación”, explicaba.
Todo ello pasará por una obligación inmediata en la recta final de la primera vuelta de la liga: “Debemos que ganar mínimo dos partidos de los tres que nos quedan. Debemos estar mínimo con 18 o 20 puntos para afrontar una segunda vuelta con muchas más posibilidades de estar en la permanencia”.