Un solitario gol ha marcado Okazaki con la SD Huesca en la actual temporada. Un registro que se aleja de lo conseguido en la anterior en Segunda División. Sin embargo, el delantero nipón no quiere bajar los brazos y espera que este duelo contra el Éibar sea un punto de inflexión para él.
No será un partido más, tendrá un toque muy especial debido a que, seguramente, coincidan en el mismo campo tres jugadores de Japón por primera vez en LaLiga. El azulgrana admite estar encantado con esta cita: “Un duelo japonés siempre es una motivación extra. Jugar contra Inui y Muto sirven de aliciente para mí”.
Sin embargo, sobre el campo no habrá amigos ya que ambos equipos llegan en situaciones muy complicadas y “sumar una victoria es una prioridad. Por ello: “Aunque no sea agradable enfrentarse en estas circunstancias, es lo que toca. Lo daremos todo para obtener la victoria”.
Okazaki confía en que la SD Huesca logre un triunfo porque “el ambiente y la dinámica del equipo son muy buenas”. Además, “podría ser muy significativo para la lucha por la permanencia” ante un rival directo.
El nuevo rol
“Con Pacheta ha cambiado los planteamientos. Con una mayor solidez defensiva, intentamos buscar más la contra; sin embargo, hemos mantenido el estilo de juego de Míchel de manera que estamos consiguiendo desplegar un juego muy equilibrado”, explicaba el japonés.
¿Podrá recuperar el olfato goleador de la pasada campaña? “El míster me está pidiendo un función más colaborativa, bajar los balones largos y buscar las espaldas de los defensas. Personalmente, no estoy satisfecho con el rendimiento que he demostrado hasta ahora en esta temporada, y por ello voy a esforzarme mucho más para poder aportar el máximo al equipo”, concluía.