Era el enfrentamiento más complicado para la SD Huesca en este tramo final de temporada, una Real Sociedad ganadora de la Copa del Rey que quería asegurar su puesto en la Europa League. Sin embargo, la situación extrema de los azulgranas en la clasificación obligaba a ir a por la victoria, sin excusas, con todo.
La ausencia de Insua era novedad por una indisposición de última hora mientras que Maffeo, recuperado tras estar más de un mes lejos de los terrenos de juego, volvía al once titular así como Álvaro Fernández. De hecho, el guardameta riojano tardó muy poco en tener la primera oportunidad de lucirse. A los 20 segundos del inicio del encuentro, Guevara finalizó una rápida y muy buena jugada de los donostiarras que sacó los mejores reflejos del azulgrana.
Este pequeño susto sirvió para que el conjunto de Pacheta reaccionara positivamente y, poco a poco, comenzó a hacerse con el control del partido. Imanol Alguacil planteó una presión fuerte desde el inicio pero, en esta ocasión, los altoaragoneses supieron salir muy bien con balones largos que llegaban a buen puerto. Esto, obligó al equipo txuriurdin a tener que retroceder poco a poco sus líneas dejando que el Huesca pudiera tocar el balón con mayor comodidad.
Mereciendo más
Las ocasiones comenzaron a llegar por parte de los locales. Un remate de cabeza tímido de Sandro, una llegada en velocidad de Ferreiro o un disparo lejano del propio canario que se marchó desviado… La SD Huesca no conseguía ser preciso en sus ocasiones mientras que la Real Sociedad esperaba una chispa para crear problemas. Y a punto estuvo Isak de hacerlo pero, nuevamente, Álvaro Fernández evitó el drama con otro paradón.
En el minuto 38, los oscenses tuvieron las dos ocasiones más claras. Primero, una gran jugada entre Ferreiro y Seoane que dejó un pase perfecto para Mir. El murciano decidió intentar sorprender con un disparo de primeras que obligó a Remiro a realizar una gran parada. En ese mismo córner generado, Siovas se alzó entre el resto de jugadores para rematar un buen centro que se marchó por encima del larguero. Llegó el descanso tras dejar un primera parte en la que el Huesca fue mucho más valiente y pudo merecer más.
El milagro canario
La segunda parte tardó mucho en arrancar. Alguacil animó a los suyos a que volvieran a adelantar las líneas para intentar recuperar algo del control del partido. El Huesca, con mayor peso en las piernas, no pudo ser tan eficaz en la rotura de líneas y el número de ocasiones, por parte de ambos equipos, decayó.
Remates débiles de los donostiarras, delantera desaparecida de los azulgranas… El partido pasó de tener mucho fútbol a ser prácticamente inexistente. El nerviosismo se apoderó de ambos bandos conscientes de lo peligroso que suponía dejar la retaguardia descuidada.
Al final, el gol que lo decidió todo llegó, por fortuna, por el bando azulgrana. Una falta escorada lanzada por Sandro, desviada por Elustondo, descolocó a Remiro que no pudo hacer nada para evitar el gol. La locura se desataba en El Alcoraz y en una SD Huesca que supo mantener con madurez los minutos finales. Mateu Lahoz pitó el final certificando tres puntos para los de Pacheta que vuelven a salir, de manera momentánea, del descenso. Todavía queda mucha liga.
Ficha técnica
SD Huesca: Andrés Fernández; Galán, Siovas (Doumbia (90′), Pulido, Vavro, Maffeo (Pedro López, 74′); Mikel Rico (Mosquera, 74′), Seoane, Ferreiro (Sergio Gómez, 67′); Sandro (Gastón Silva, 90′) y Rafa Mir.
Real Sociedad: Remiro; Monreal, Le Normand, Elustondo, Gorosabel (Zaldúa, 64′); Oyarzabal (Silva, 64′), Zumendi, Guevara, Januzaj (Barrenetxea, 54′), Portu e Isak (Bautista, 75′).
Goles: 1-0, Sandro, min. 87.
Árbitro: Mateu Lahoz amonestó a Gorosabel (52′), Seoane (76′), Zaldúa (86′), Pulido (89′).