ZARAGOZA | La SD Tarazona logró una victoria vital en su visita a Las Llanas (0-2) ante un rival directo como el Sestao River, en un partido cargado de tensión, ocasiones y polémica. Los aragoneses, que encadenaban dos empates consecutivos, dieron un paso firme hacia la permanencia con un triunfo de carácter que les permite abrir una brecha de seis puntos con el descenso.
El equipo de Juanma Barrero mostró personalidad en un campo complicado, superando un arranque difícil, resistiendo cuando tocaba sufrir y golpeando con eficacia cuando tuvo la oportunidad. El partido comenzó con mayor ímpetu local, obligando a la defensa turiasonense a intervenir con contundencia. Dos llegadas muy claras del Sestao en los primeros minutos encendieron las alarmas, pero Fuentes y Pepe Mena respondieron con peligro, e incluso este último estuvo a punto de marcar de córner directo, obligando al meta local a despejar en el primer palo.
La gran polémica llegó en el minuto 25, cuando Adrián Fuentes marcó un golazo tras un control en carrera, pero el colegiado lo anuló por mano. La decisión desató la indignación del conjunto visitante, que además reclamó un penalti no señalado tras el descanso.
Fuentes se redime con el 0-1
Lejos de venirse abajo, el Tarazona regresó del vestuario con las ideas claras. En el minuto 59, un gran centro de la izquierda encontró a Fuentes en el segundo palo, que esta vez no perdonó. Era su decimocuarto gol de la temporada y el que abría un partido que hasta ese momento seguía igualado.
El equipo aragonés pudo ampliar su ventaja poco después. Primero con una volea de Ángel López que se fue por poco y luego con un remate de Chechu al larguero a puerta vacía, tras un gran centro del propio Ángel.
Fuoli y Rivas cierran el partido
Con el 0-1, el Sestao se volcó en ataque, y ahí emergió la figura del guardameta del Tarazona, Fuoli, que salvó el empate en dos acciones decisivas, una de ellas con una espectacular estirada en el minuto 87. También el poste evitó el gol de Córdoba tras un potente disparo desde dentro del área.
En la última jugada del partido, con los vascos completamente lanzados, Agüero lideró una contra letal y asistió a Luis Rivas, que definió con calidad tras recortar a su marcador. El 0-2 definitivo fue un golpe certero a un rival directo y una inyección de confianza para los rojillos, que se aferran con fuerza a su plaza en Primera RFEF.