HUESCA | Óscar Sielva se sube al autobús del Huesca para guiar al equipo de Hidalgo en Ipurua. No es un alta más, el equipo oscense recupera a su líder. Ejemplo dentro y fuera del terreno de juego llegará a Éibar. El juego comenzará por sus botas y su incansable ímpetu le permitirá a su compañeros recolocarse para las acciones defensivas. Además, el medio es fundamental en el balón parado, aunque al ser su primer partido tras lesión deberá decidir si puede o no arriesgar botando la estrategia. Los de Hidalgo han jugado seis partidos sin él esta temporada y no han sabido pasar del empate.
La principal duda que se presenta con Sielva es cuantos minutos aguantará sobre el terreno de juego. Hidalgo va a tener marcado por el cuerpo médico unos tiempos de juego que deberá respetar para evitar posibles recaídas de Sielva y de Soko. En principio la lesión de Soko era menor que la de Sielva, por lo que la presencia del camerunés en el once estaría garantizada. Lo normal serían 60 minutos del camerunés y 30 del catalán, pero las sensaciones de los futbolistas también serán importantes. La evolución del de Olot ha sorprendido a propios y extraños y sus ganas han acelerado el proceso. Una gran noticia para la afición que disfrutará de uno de sus jugadores más queridos ante el Eibar.
Sielva antes de firmar por el Huesca
Sielva volverá al que fuera su campo durante la temporada 21/22. En Ipurua lo ficharon tras una gran temporada en la Ponferradina. El Eibar pagó 600.000 euros por su traspaso y el rendimiento no fue el esperado. Allí jugó 18 partidos y solo tres fueron como titular. Garitano, el entrenador de los vascos, no confió en él y el jugador decidió cambiar de aires a final de temporada. El Huesca firmó a Sielva al ser petición expresa de Ziganda con una cesión con opción obligatoria de compra. 200.000 euros le costó al Huesca uno de los mejores fichajes de su historia.