Tenía algunos temas atrasados que no quería que quedaran en el olvido, guardados en un cajón y cogiendo polvo, porque eran interesantes, pero entre el verano, la pretemporada y los fichajes, me parecía que molestaban ligeramente en la actualidad azulgrana.
Por eso los saco ahora, aprovechando que el equipo le ganó al Valladolid, y que ahora se ve el futuro inmediato con otros ojos.
Quería hablar sobre la memoria, esa cosa que a veces se nos despierta para recordar algo que nos conviene y que otras veces se esconde cual caracol en su concha cuando no nos interesa que se recuerden según que cosas.
Antes de afrontar este tema, advierta el lector este matiz. Tras perder ante el Huesca, el entrenador de uno de los mejores equipos de Segunda a mi entender, nos recuerda en rueda de prensa esto: “Además, me han dicho vuestros compañeros que la falta sobre Herbías es dentro del área…” Curiosamente o no, a Sampedro no le dijeron, o no quiso acordarse, que en la primera mitad trabaron a Cucho con claridad dentro del área visitante cuando el partido estaba empatado a cero, pero claro, eso quizá no convenía recordarlo. ¿Ven? Nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena.
Pues recordando recordando, recuerdo al alcalde de Huesca decir que nadie mejor que el Huesca este año para ser quien lanzara el cohete de las fiestas de San Lorenzo. Y como la cosa se dijo a finales de junio y el tiempo pasaba rápidamente y nadie decía nada, todo el mundo dio por supuesto que el Huesca, con todo merecimiento, obtendría el reconocimiento de su ciudad con el lanzamiento del cohete anunciador.
No entraré quien propuso la idea, no entraré en quienes la apoyaron y quienes no, porque esto no es la sección de política local, y son temas que no me gusta tocar, pero resulta que como ciudadano empadronado en Huesca, a mí y a muchos otros, nos hicieron elegir entre una SAD que nos representa por toda España, que nos ha dado muchas alegrías en la última década, que ha puesto el nombre de Huesca muy alto por su temporada y por jugar un ‘playoff’ de ascenso a Primera, o la institución que vela por nuestra salud, nos quita los dolores y nos hace la vida mucho más saludable, y elegir a uno era dar la espalda al otro.
No entraré en quien tiene más mérito, no me pronunciaré quien lo merecía más porque me obligaron a no votar tal y como estaban las cosas, pero le pese a quien le pese, la ciudad de Huesca está en deuda con su club de fútbol más representativo. Y mal haría en retrasarlo, porque luego, con razón, el presidente Lasaosa alude a la mala memoria que más de uno tiene con el Huesca, y en muchos casos, no le falta razón.
Ahora bien, si hablamos de homenajes o deudas, no resultaría raro que algún edil del consistorio oscense se preguntara, ¿qué ha hecho por el Huesca Miguel Concepción, presidente del Tenerife, para recibir en el palco de El Alcoraz una placa de reconocimiento? ¿En base a qué ese reconocimiento? O también porqué el trofeo veraniego del Huesca ha llevado en 3 ocasiones el nombre de Antonio Alfonso: ¿en reconocimiento a qué exactamente?
Yo tengo memoria. Sé quien es Miguel Concepción y quien fue Antonio Alfonso, también quienes fueron Jesús Viñuales y Armando Borraz, o quienes son Luis Ausaberri o José María Mur, por citar algunos nombres.
Por eso ya ve, querido lector, que usamos la memoria para lo que nos conviene. Quizá hasta yo mismo haya ignorado nombres o detalles en estas líneas, pero eso sí, a diferencia de Sampedro o de otros nombres, yo no lo he hecho conscientemente ni por interés.