El entrenador del Real Zaragoza juvenil, Iván Martínez, ha declarado que la victoria por 1-0 contra el Korona Kielce en la ida de la primera eliminatoria de la Champions es buena al no haber encajado ningún gol. El técnico del conjunto blanquillo tenía “claro” que uno de los objetivos principales era “mantener la portería a cero”. Lo han conseguido y por tanto, se ha mostrado satisfecho.
“Es un día para recordar en el zaragocismo. Se ha debutado en la competición europea juvenil, que es un sueño para los chicos junto a debutar en el primer equipo. Se ha ganado, aunque ha sido un partido en el que podía haber pasado de todo. Hemos podido ganar por más goles y también nos podían haber empatado”, ha destacado Iván Martínez, entrenador del Real Zaragoza juvenil.
A este respecto, Martínez ha apostillado que sus jugadores habían tenido ocasiones para haber logrado un segundo e incluso un tercer tanto. A pesar de ello, al final les ha tocado sufrir porque el partido se les había hecho “largo” en el aspecto físico. Martínez ha reconocido una “pizca de suerte” para no recibir ningún tanto.
Iván Martínez ha resaltado que para sus jugadores se había “cumplido un sueño” que era jugar en La Romareda. Cree además, que esto era “un paso en su formación”. Igualmente ha querido dar las gracias a todos los que habían acudido al estadio zaragozano. “No imaginábamos que vendría tanta gente. Pensábamos que tres o cinco mil y tenemos que agradecerlo. Ha sido una sorpresa”, ha apostillado el entrenador del Real Zaragoza juvenil.
El técnico zaragocista ha señalado que el hecho de jugar ante 12.000 personas ha creado nervios en el inicio del encuentro. Luego, eso sí, esos nervios han desaparecido y sus jugadores han sido superiores a los polacos en la primera mitad y en los primeros 20 minutos del segundo tiempo.
Una vez conocido al Korona Kielce, Iván Martínez ha apuntado que en el encuentro de vuelta tendrán que poner “las mismas ganas e ilusión”, pero sabiendo que el conjunto polaco es “muy buen equipo”.