El azulgrana fue sustituido al descanso el pasado sábado por primera vez en lo que va de temporada, siendo hasta la fecha -junto a Álex Remiro- el único jugador del Huesca que lo había jugado todo en este inicio de Liga 1|2|3.
El nivel mostrado por Akapo en este inicio de Liga 1|2|3 está siendo espectacular. Buena muestra de ello son los 1.035 minutos jugados hasta la fecha en los 12 encuentros que lleva el equipo azulgrana a sus espaldas. Y lo más destacado es que, hasta el partido de Albacete, lo había jugado todo, siendo pieza clave tanto por su nivel ofrecido, como por la polivalencia que ofrece a Rubi en su esquema. La baja de Brežančić y la juventud de Rulo -al que le está costando adaptarse- fueron claves para que su presencia en el flanco izquierdo supusiera una solución que, a tenor de lo visto, ha resultado muy satisfactoria.
Y es que si algo está caracterizando al lateral azulgrana en este buen inicio es su imponente estado físico. Pero al igual que ocurrió en la jornada inicial en Soria -donde el equipo disputó un mal partido-, en el Belmonte le tocó sufrir más de la cuenta. A buen seguro, la tarjeta amarilla vista en el minuto 26 de partido condicionó la decisión del técnico barcelonés, que en vistas de la rigurosidad arbitral en faltas y tarjetas hacia el cuadro oscense, le concedió el primer respiro de lo que llevamos de campeonato.
Que la temporada pasada ya dejó un buen poso en el aficionado oscense es un hecho, y que a sus 24 años todavía tiene mucho potencial por explotar, también. Sin duda se trata de un lateral con un enorme poderío físico, que tiene recorrido, es ambicioso y dota al equipo de una profundidad que, como es lógico, se ve mermada al jugar a pierna cambiada. Su tendencia, en izquierda, de ir hacia dentro le limita y mucho para poder explotar su enorme recorrido por banda. A pesar de ello se ha desenvuelto de una manera notable, y salvo dos partidos (Soria y Albacete), donde además el equipo tampoco ha estado a un buen nivel, ha cumplido con nota.
Hasta 76 recuperaciones
Otro aspecto a destacar está siendo su mejoría en la lectura de los partidos. Sus dos amarillas así lo demuestran, y lo más importante: ha sabido aprender de los errores y evolucionar en positivo. Buena muestra de ello es que es, con 79 recuperaciones, es el segundo defensa que más balones roba de esta Liga 1|2|3, sólo superado por Álex Moreno (Rayo Vallecano). A todo ello le suma 23 interceptaciones en una lista que lidera el también azulgrana Jair, con 28. Este hecho deja a las claras que no sólo esta siendo eficaz, sino que no está necesitando cargarse de faltas ni amarillas innecesarias que condicionarían sus acciones a lo largo de los partidos.
Muy buenas sensaciones las dejadas por el lateral azulgrana. Tras la recuperación de Brežančić veremos cuál es el papel que le toca desempeñar. Por el momento, los minutos de descanso que gozó a buen seguro le habrán venido bien para recuperar en vistas al emotivo partido del próximo día 6 de noviembre ante el Real Zaragoza. Allí saldremos de dudas si sigue siendo el lateral izquierdo titular o, por el contrario, Rubi decide que regrese a su costado natural.