Comenzó muy bien la temporada la SD Tarazona pero las cosas se fueron torciendo con el avance de las jornadas. Tanto que ahora, los turiasonenses se juegan todo en la última jornada ante el Mutilvera. En este último partido de la primera fase del campeonato, el Tarazona debe ganar y esperar que no gane el filial de Osasuna, que juega ante el Ejea, para alcanzar la sexta plaza y estar automáticamente salvado.
Si estas circunstancias se dan, los de David Navarro jugarán la temporada que viene en la Segunda RFEF y jugarán la segunda fase del campeonato con el objetivo de unirse posteriormente a los equipo que luchan por ascender a la Segunda PRO.
Un empate también les podría servir, siempre y cuando Osasuna B no sume ni un punto ante el Ejea. La derrota supondría quedar en séptima posición y tener que luchar por no bajar a Tercera División.
“Hemos tenido mucho tiempo para preparar el partido y reforzar nuestras ideas en cuanto a estrategia. Tenemos la certeza de que hemos preparado bien el encuentro y que el mensaje ha llegado a los jugadores. Haciendo nuestro trabajo y teniendo claro lo que tenemos que hacer, no debemos mirar a otros campos”, afirma el segunda entrenador del Tarazona, Pablo Quilez.
Mientras tanto, el rival, Mutilvera, pelea por agotar sus opciones de alcanzar la tercera plaza y pelear directamente por la Segunda PRO. La clasificación está tan igualada que también se da la circunstancia de que si Osasuna B y Tarazona ganan superarían al Mutilvera en la tabla y este debería pelear por no bajar a Tercera. Cualquier cosa puede pasar en este partido a todo o nada.