Después de muchos años invirtiendo y prometiendo un proyecto que pusiese la vía directa a Primera División, al fin, parece que este es el año para el conjunto almeriense. Tiene mérito ir primero con una ventaja tan amplia en una categoría tan compleja e igualada como es la Segunda División. Los datos de la UD Almería hablaban por sí mismos y contrarrestaban con el arranque paupérrimo de una SD Huesca recién descendida. Hoy, ambos equipos se veían las caras en un partido donde, pese a la diferencia sobre el papel, Xisco Muñoz dejó claro que no irían amedrentados.
Y en el inicio del partido lo cierto es que se cumplió en cierta medida aunque los locales, que llegaron a tener más del 70% de la posesión en la primera hora, tan solo tardaron tres minutos en dar el primer aviso. Los azulgranas intentaban sorprender a la contra pero una vez que llegaban a las tres cuartas partes del campo las ideas se volatilizaban y entonces aparecían los individualismos, los cuales echaban por tierra cualquier oportunidad de crear peligro.
El primer susto
Cuando más serio estaba el equipo, llegó un fallo imperdonable en la salida de balón que acabó con Pulido derribando a Sadiq dentro del área. El propio nigeriano fue el encargado de lanzar el penalti pero lo perdonó lanzándolo directamente fuera. Con otra ocasión a balón parado Curro pudo adelantar de nuevo a los suyos con un auténtico golazo pero su disparo se encontró con el poste izquierdo de Andrés.
Los chicos de Xisco Muñoz iban a demasiadas revoluciones acometiendo faltas innecesarias y de extrema dureza. De hecho, en 33 minutos, el equipo ya contaba con cuatro tarjetas amarillas e incluso Gaich pudo haber sido expulsado perfectamente. Con esta versión tan agresiva y con algo de fortuna, los jugadores se marchaban al descanso con empate a cero en el marcador.
El comienzo de algo nuevo
La segunda parte comenzó con protagonismo un poco más dividido y acercamientos al área por parte de ambos. Ante la gran ausencia del centro del campo, el técnico balear decidió hacer el primer cambio del partido reforzando dicha línea con la entrada de Juan Carlos que sustituyó a Gaich.
Y de repente, en una jugada aislada, saltó el susto en el Municipal de los Juegos Mediterráneos. Una rápida contra de Joaquín acabó encontrando un buen pase de la muerte para Seoane que remató a placer. Gálvez Rascón lo dio por bueno pero el VAR, posteriormente, acabó anulándolo por un fuera de juego milimétrico. Aunque el gol no subió al marcador, sirvió para animar a la SD Huesca y hacerles ver que podían dar la sorpresa contra el Almería. Otro segundo fuera de juego ajustado de Joaquín evitó lo que hubiese sido un claro penalti de Fernando sobre el malagueño.
Del segundo susto al optimismo
El conjunto de Rubi intentó reaccionar de manera inmediata para evitar que los visitantes se lo creyeran demasiado pero Andrés Fernández estaba muy serio bajo palos. Después de 15 minutos frenéticos, volvió la calma al verde. Entonces llegó la peor noticia para los altoaragoneses. Joaquín, quien estaba siendo lo más destacado del equipo tanto en Almería como en el encuentro contra el Ibiza, se retiraba lesionado. Al finalizar el partido, aclaró que no se trataba de nada grave, dejando todo en un susto.
En los últimos minutos ocurrió algo que hacía mucho tiempo que no se veía. El equipo no se echó atrás, no se replegó; se animó, sacó un mayor desparpajo y luchó por la victoria. Y todo ello, encima, contra el líder. Seoane y Mikel Rico pudieron dar la campanada en los últimos instantes pero el gol no llegó.
El partido finalizó tal y como había comenzado, con resultado gafas: 0-0. Sin embargo, fue el empate que mejor boca dejó de todos los que ha cosechado el Huesca durante esta temporada. Un empate que realmente invita al optimismo y no por el rival contra el que se consiguió -que también- sino por las buenas sensaciones dejadas, sobre todo, en la segunda parte. Hoy la SD Huesca compitió de tú a tú al líder de Segunda División. Porque esto debe ser el comienzo real de algo nuevo, el punto de inflexión en el que los azulgranas se quiten por completo sus complejos de inferioridad y den un paso hacia adelante.
Ficha técnica
UD Almería: Fernando; Akieme, Babic, Chumi, Pozo; Curro (Sousa, 71′) De la Hoz, Puigmal (Ramazani, 59′); Lazo (Appiah, 59′), Sadiq (Robles, 71′) y Portillo (Villar, 78′).
SD Huesca: Andrés Fernández; Miguel, Miquel, Pulido, Ratiu; Mosquera, Salvador, Seoane; Marc Mateu (Mikel Rico, 67′), Gaich (Juan Carlos, 51′) y Joaquín (Pitta, 78′).
Goles: 0-0
Árbitro: Gálvez Rascón amonestó a Gaich (18′), Pulido (22′), Ratiu (31′), Joaquín (33′), Akieme (82′), Ignasi Miquel (96′).