Siguen las reuniones entre los diferentes estamentos del mundo del fútbol para analizar la situaciones de las Ligas europeas ante la paralisis provocada por el coronavirus. Si hace unos días, las reuniones se producían entre LFP, clubes y futbolistas; ahora ha sido el turno de la UEFA y la FIFA. Las posturas son cercanas. Todos están de acuerdo, salvo clubes con intereses particulares, en que la temporada debe terminar en los meses de verano.
La UEFA ha anunciado a las Federaciones que da un paso más en este sentido y anula todos los eventos que pudieran estar previstos para los próximos meses. El calendario queda totalmente despejado para que la actual temporada pueda concluir durante este verano e incluso, alcanzar semanas de la que hubiera sido ya la campaña 2020 – 2021 que, evidentemente, este año comenzará con meses de retraso. La Champions y la Europa League deberán esperar a que concluyan primero las competiciones domésticas.
Con este planteamiento sobre la mesa está claro que los equipos deberán prorrogar los contratos de sus jugadores más allá del 30 de junio. Se trata de una situación en la que se encuentran muchos futbolistas de Real Zaragoza y SD Huesca. En primer lugar, aquellos que se encuentran cedidos en cualquiera de los dos equipos aragoneses, pero también otros que terminan sus contratos el próximo verano y que aún se encuentran pendientes de renovación. Además, se prolongarían también las cesiones de jugadores de Huesca o Zaragoza que se encuentran actualmente en otros equipos, como puede ser el caso de Pombo en el Cádiz o Papu en el Racing.
Contratos más allá del 30 de junio en la SD Huesca
En este sentido, la FIFA ya ha anunciado que los contratos que finalizan el 30 de junio quedarán prorrogados de forma automática. Las rebajas salariales o ERTEs aplicados en muchos clubes también ayudarán a sobrellevar esta circunstancia. La seguridad de que las plantillas no se vean alteradas para finalizar la competición es, ahora mismo, total.
En el caso de la SD Huesca, Míchel podrá seguir así contando con un buen número de jugadores que finalizan contrato el 30 de junio. Es el caso de los cedidos Yañez, que llegó desde el Getafe, Sergio Gómez del Borussia Dortmund, Cristo del Udinese o Miguelón y Dani Raba que son propiedad del Villarreal.

Hay otros jugadores de la SD Huesca que también terminan contratos cesión el 30 de junio, pero en cuyos contratos estaba contemplada una opción de compra. En esta situación se encuentran Insua, Josué Sá, Datkovic, Doukouré y Jordi Mboula, en este último caso, también hay opción de compra sobre el futbolista. Son propiedad del Huesca pero terminan contrato este verano Luisinho, Pedro López y Okazaki, que ya cuenta con la opción de renovación.
Continuidad en la plantilla del Real Zaragoza
Mientras, en el Real Zaragoza no hay tantos futbolistas que terminen su vinculación con el club el 30 de junio. Hay 7 cedidos que deberían prorrogar su estancia en Zaragoza. Es el caso de Javi Puado a préstamo desde el Espanyol, Luis Suárez que es propiedad del Watford o Soro que pertenece al Real Madrid. Los tres son piezas clave para Víctor Fernández.
Hay otros futbolistas que también finalizan contrato de cesión el 30 de junio, pero en este caso cuentan con opciones de renovación ya contempladas en sus contratos. Burgui del Alavés y El Yamiq del Genoa renovarán de forma automática con el Real Zaragoza en caso de ascenso. También cuenta con opción de renovación, aunque en este caso no es obligatoria, Álex Blanco cedido desde el Valencia. El portugués André Pereira también está cedido, aunque en este caso su aportación no está siendo relevante para el equipo.

Además, hay tres futbolistas que finalizan contrato con el Real Zaragoza el próximo 30 de junio. Son Linares, Dani Torres y Eguaras. De estos tres, solo Eguaras tiene la garantía de continuar la próxima temporada. No se ha anunciado oficialmente, pero la renovación del navarro ya está pactada.
A todo ello hay que sumar que una vez que la cuarentena pase, los equipos necesitarán un mínimo de 15 días para recuperar la forma física y no ponerse a competir de inmediato, algo que acentuaría el riesgo de lesiones musculares. Nos espera, por tanto, un verano repleto de fútbol y emociones.