Contento por la victoria, pero poniendo el freno a la euforia tras los 10 de 12 puntos. Ese es el principal mensaje que se traduce de la comparecencia de Víctor Fernández tras el triunfo del Real Zaragoza en Alcorcón. Señala que el equipo “todavía tiene que mejorar”.
Sin egos
Víctor pone como tarea al equipo “conservar la actitud competitiva”. “Es un equipo generoso, compacto, solidario, sin egos, valiente, decidido y con ambición“, valora. Unas virtudes que les han permitido ganar en “un campo de los más difíciles de la categoría”. En frente estaba un rival “que había ganado 2 partidos pero había merecido ganar los 3”.
El técnico zaragocista recalca que ha sido un partido “muy controlado” y que han crecido “respecto al partido de Ponferrada“. “El tercer gol es la expresión de lo que yo quiero: circulaciones rápidas y finalizando con disparo a portería. Teníamos que jugar con mucho vértigo porque ellos no se rinden y de cualquier lugar te pueden sacar una ocasión. Por tanto, es un reconocimiento al trabajo que el equipo había hecho anteriormente”, ha expresado.
El caso Pombo
Víctor Fernández ha sido preguntado por la situación de Jorge Pombo. El canterano era incluido a última hora en la convocatoria tras la baja de James Igbekeme. Víctor deja claro que “Pombo es uno más, con los mismos derechos y obligaciones y tendrá sus momentos cuando el equipo lo requiera”. “Si no contara con Jorge, me habría traído a Delmás”, ha matizado.
También ha habido elogios para los delanteros Luis Suárez y Raphael Dwamena porque “ambos hacen un trabajo brutal” que hoy ha estado acompañado del premio del gol. Del mismo modo, se ha querido quitar méritos del buen funcionamiento del equipo: “Manejamos 3 o 4 registros futbolísticos, y los sistemas los hacen buenos los jugadores”.
No euforias
Tras 10 de 12 puntos y la segunda posición en la Liga Smartbank, es lógico que la afición esté ilusionada con el inicio del curso. No obstante, Víctor es prudente. “Se equivocan (los aficionados) si están eufóricos. La alegría no nos tiene que llevar a estados desmedidos que nos alejen del razocinio”, ha concluido.