Decía Nolasco que su equipo merece algo más de respeto por los años que apila en la Asobal y por su juego. Y también que ese respeto se gana sobre la pista, firmando buenos encuentros. Ya puede añadir una muesca más a las cachas de su revólver. Ha ganado en Pamplona, en La Catedral, ante un club que vive y hace de la difusión del balonmano un ejemplo. Ha ganado sin contestación. De principio a fin. Sin dejar atisbo a la duda. Son dos puntos más como los de cualquier otro encuentro en los que tras el bocinazo final rubricas el triunfo. Pero cuando lo haces sobre este 40×20 y vienes de ganar en Guadalajara, empatas en tu casa ante el Logroño -ganando a dos minutos del final y de allí el respeto que se pide- y cierras esta trilogía en casa de un rival como el Anaitasuna con victoria, esos dos puntos saben mejor.
El Bada Huesca volvió a demostrar que está en un momento dulce de juego y marcó el ritmo del partido y en el electrónico ante un Anaitasuna que busco cómo acortar diferencias en el marcador en todo momento. El siete aragonés lideró el choque desde el inicio con los goles de Bonanno y Alex Marcelo, quien con tres finalizaciones consecutivas disparó a su equipo en el marcador (4-7). Nantes, con cinco goles en la primera parte, puso la réplica en el Anaitasuna para igualar el partido mediada la primera mitad (7-7). Fue ese momento crítico donde quien viene por abajo se puede crecer. El siete que capitanea Marco Mira no se dejó y volvió a abrir hueco en el marcador al aprovechar las pérdidas de balón de los locales y golpear a la contra (9-12). Aún y todo y con una renta de dos goles al descanso (11-13) nada parecía decidido.
Sin embargo, no era el día del Anaitasuna. Sin portería y víctima del ritmo lento del Huesca, el equipo navarro arrancó mal el segundo periodo al encajar un parcial de 1-3 (12-16, m.37). A remolque y con solo Nantes inspirado en ataque, el Anaitasuna fue incapaz de remontar, a pesar de que tuvo varias opciones de colocarse a un gol, pero el Huesca mandó en el juego y Alex Marcelo siguió acertado en los lanzamientos, bien apoyado por Adrià Pérez.
De esta forma, el Anaitasuna vuelve a la senda de las derrotas con las que empezó el campeonato y el Huesca sigue peleando en la zona alta de la Liga Asobal a la espera de recibir al Ademar León.
FICHA TÉCNICA
Helvetia Anaitasuna (11+12): Bols; Gastón (1), Ceretta (1), Ugarte (2), Krsmancic (3, 1p), Nantes (9), Barricart -siete inicial-, Salazar (ps), Bazán (1), Pujol (1), Chocarro (2), Vaquer (2, 1p), Méndez (1), Meoki, Goñi y Etxeberria.
Bada Huesca (13+14): Gómez; Carmona (1p), Adrià Pérez (4), Marco Mira (3), Mota (2), Bonnano (4), Carró (1) -siete inicial-, Arguillas (ps), Alex Marcelo (8), Ostojic, Miguel Malo, Val, Oier (2), Camas (1) y Zungri (1).
Marcador cada cinco minutos: 1-3, 3-6, 7-7, 7-9, 9-10, 11-13 (descanso). 12-15, 14-16, 15-18, 18-20, 20-23, 23-27 (final).
Árbitros: Jesús Álvarez y José Carlos Friera. Excluyeron dos minutos a Ceretta, Vaquer (2) y Etxeberria, del Anaitasuna, y a Marco Mira, Bonanno (2) y Val, del Huesca.
Incidencias: partido de la sexta jornada de la Liga Asobal disputado en el Pabellón Anaitasuna ante unos 1.300 espectadores.