Es posiblemente uno de los mejores partidos que ofrece la actual Asobal. Los BM Huesca-Anaitasuna siempre van cargados de rivalidad. El duelo se abre esta temporada en la Catedral. El amistoso de pretemporada entre ambos sietes tan solo sirve para acordarse de la lesión de cruzados de Pinto, que se recupera a velocidad de crucero. Este sábado, a las 19.00, el viejo pabellón volverá a ser protagonista y con aficionados del equipo altoaragonés en la grada. Pamplona está cada vez más cerca y el espectáculo merece ese esfuerzo por ir a la entidad que se asienta en el barrio de San Juan.
El trasvase de jugadores entre ambos equipos ha sido un goteo constante. Hace ya muchas temporadas recaló en Huesca Álex Marcelo. El zurdo de oro no brilló en Pamplona y sí en Huesca. Ahora, a las órdenes de Nolasco, también se encuentra Filipe Mota con pasado pamplonica. Ya iba camino a Portugal cuando recibió la oferta de Huesca y decidió abrir un paréntesis –quien sabe si tan solo por esta temporada- para jugar en el equipo aragonés.
Volver a la que fue tu casa siempre es peculiar. “Tengo allí amigos y antiguos compañeros por lo que sí, va a ser un partido especial”, señala el hoy central del Bada Huesca que advierte que su anterior equipo juega “con una defensa agresiva y un rápido contraataque que le permite hacer goles rápidos”. Los dos llegan a la cita de este sábado en buena forma y con buen balonmano. En el caso del siete altoaragonés, la victoria contra Guadalajara y el empate contra Logroño, que nadie hubiera puesto en duda en el caso de que hubiera sido victoria, le ha insuflado cierto optimismo. En este sentido, conseguir una victoria en la Catedral supondría un espaldarazo importante, seguir atado a la zona noble de la tabla. Mota defiende el ‘partido a partido’ y subraya que los 60 minutos contra Anaita “van a ser muy complicados” por lo que “si no estamos en nuestro mejor momento se nos complicará”.
El central espera que las gradas del viejo pabellón del Anaitasuna estén pobladas porque es uno de esos partidos que están llamados a ser intensos, con dos equipos que hacen un buen balonmano. El Bada se encuentra inmerso en este mes de octubre lleno de minas. Tras Logroño y Anaitasuna tocará jugar contra Ademar León y luego -3 de noviembre- contra Granollers. “Es complicado, pero son los partidos que gustan jugar. Si sacamos esos puntos será bueno, aunque a veces es mejor combinar la dificultad, pero bueno estamos aquí para jugar y ya está”, señala.
Mota se siente a gusto en Huesca, contento porque las cosas están saliendo bien y respecto a su continuidad se mantiene cauto, sonríe y dice que la decisión “también dependerá de lo que diga mi mujer y mi cuerpo, que uno ya va teniendo una edad”. Sus 34 años son una buena carta de presentación en el vestuario. La madurez –“pero con espíritu joven”, precisa entre risas- le da galones en un equipo donde el portugués con Pinto fueron las únicas incorporaciones –más Ostojic por la lesión de Pinto- “y sí, aunque es mi primer año intento ayudar a los más jóvenes desde mi experiencia, pero el trato es de igual a igual. Es más ayudar que mandar”, dice Mota.
El Bada Huesca ha hecho esta mañana el último entrenamiento de la semana con todos sus jugadores listos para la convocatoria a la que se sumará el central Eloy Félez, que el jueves fue padre. Por su parte, en Pamplona, las victorias frente a Teucro y Puente Genil han elevado el ánimo después de un inicio de liga complicado por el calendario. Ahora se ve la vida de otra manera. El entrenador del Anaitasuna, Iñaki Aniz, se agarra a la mejoría de las últimas jornadas para confiar en una victoria ante el Huesca, contra el que no podrá alinear al lateral vasco Mikel Aguirrezabalaga, señala Efe. El técnico navarro señaló que, aparte de la trayectoria de los últimos años del Huesca, el equipo aragonés “ha empezado especialmente bien este año” y ello “le hace un rival más difícil”, aunque precisó: “Ellos también pensarán que no es buen momento para jugar contra nosotros”. “Será un partido muy igualado que se decidirá al final y tenemos el objetivo de conseguir en casa la tercera victoria”, afirmó.