“La gran noticia del ciclismo español este año”. Lo ha dicho hoy, y quien lo ha dicho sabe de que habla. Me refiero a Pedro Delgado, ganador del Tour de Francia en el 88, que dedica estas bonitas palabras en referencia al retorno al calendario internacional de la Vuelta Aragón, tras trece largos años de ausencia. Lo dice desde el conocimiento pero a buen seguro también desde el cariño por ser parte de su historia desde su victoria en la general de la ronda aragonesa en 1983.
Si durante los próximos tres días vamos a tener ciclismo de élite por las carreteras aragonesas, principalmente será como resultado del arduo trabajo llevado a cabo por la Federación Aragonesa de Ciclismo. Un trabajo que comenzó hace ya más de un año y que gracias a la implicación del Gobierno de Aragón ha sido posible que vea la luz.
Tres provincias, tres etapas
Una lógica evidente y aplastante se ha impuesto en el diseño de las etapas para el renacimiento de la Vuelta Aragón. Como no podía ser de otra forma, los ciclistas recorrerán la vasta geografía aragonesa cruzando sus tres provincias para así acercar el espectáculo ciclista al máximo de rincones de Aragón. También cobran especial protagonismo las tres capitales aragonesas, ya que todas ellas serán salida o llegada en esta edición.
Teruel será quien acoja la salida, en una etapa que tendrá como destino el Castillo de Caspe, con un interesante final en alto por las calles caspolinas. La segunda etapa, el sábado, ya tendrá un marcado acento oscense. Unirá Huesca y Zaragoza, con un trazado que primero recorrerá por nuestra provincia el Reino de los Mallos para pasar a los pies del Castillo de Loarre, punto que bien harían en anotar para futuras ediciones, punto aún por explorar para el ciclismo de competición.
Marc Soler y los cuatro altoaragoneses
La participación es más que interesante para tratarse de una prueba “nueva” y que a su vez coincide con la disputa del Giro de Italia. Movistar, único World Tour, vendrá con Marc Soler a la cabeza. El ganador de la París-Niza será compartirá protagonismo con Jorge Arcas y Jaime Castrillo, sus dos compañeros altoaragoneses en la escuadra telefónica. Completarán la formación Carlos Barbero, Daniele Bennati, Jaime Rosón y Héctor Carretero.
Otros que correrán en casa serán Fernando Barceló y Sergio Samitier. Con el verde del Euskadi-Murias tratarán de mostrar su mayor nivel en un recorrido que conocen a la perfección. Y los cuatro luchar por el maillot negro de primer aragonés.
En cuanto al resto cabe destacar la presencia de hasta once equipos de categoría Profesional Continental, entre ellos todos los españoles (Caja Rural, Euskadi-Murias y Burgos-BH) y los franceses del Direct Energie, con Chavanel y Taaramäe, el Vital Concept y el Delko Marseille, además de los italianos del Androni, los rusos del Gazprom, el Manzana Postobón de Colombia, el Israel Cycling Academy y los norteamericanos del Team Novo Nordisk, un equipo cuyo rasgo distintivo es que todos sus ciclistas son diabéticos del tipo 1.