El partido contra la Real Sociedad B de este sábado en El Alcoraz ha pasado a un segundo plano en cuanto a Xisco Muñoz se le ha preguntado por Rubén García. El exdirector de la SD Huesca ya es historia del club y la defensa de su trabajo por el entrenador ha sido firme. Tras decir que no le tocaba valorar la decisión sobre el cese, puso el acento en que es “un tío de éxito, que le gusta trabajar”. Y lo recalcó: “Es un trabajador nato”.
Consciente de que los resultados son los que mandan en puestos como el de entrenador y el de director deportivo, Xisco Muñoz deslizó la importancia de analizar las cosas desde la frialdad. “Ha hecho muchas cosas y a la gente se le olvida fácilmente. Subió al quipo a Primera y se quedó a un gol de mantenerlo”, recordó Xisco, así como el constante trabajo “con llamadas hasta las 3 y 3.30 de la madrugada”.
El técnico del Huesca afirmó que “en el futuro” se valorará mejor a Rubén García desde Huesca y aventuró que “le va a ir muy bien en la vida”. Un entrecomillado que cimentó en que el que fuera director deportivo del Huesca hasta el martes “trabaja con pasión. En los bueno y malos momentos ha estado y gracias a él, en el mercado invernal nos quitamos un lío muy grande”.
Posible titularidad de Gaich
Por lo que respecta al rival de este sábado y su propuesta de fútbol, las lesiones y las tarjetas van a mermar la convocatoria del Huesca. Sí deslizó que “seguramente empecemos” con Gaich, deslizó que Lago Junior tendrá minutos y se sorprendió cuando se le preguntó de forma directa por si hay jugadores castigados o en el ostracismo. De hecho, retó con una sonrisa a que le dijeran qué jugadores podían estar en esta situación. En este punto precisó que Kevin está lesionado y por eso no jugará el sábado como le ocurre a Pulido.
Una rueda de prensa más, Xisco Muñoz alabó el trabajo del grupo, subrayó la profesionalidad de todos y la necesidad de ganar para que el Huesca acabe lo más alto posible en la clasificación porque eso implica dinero. También tuvo palabras de agradecimiento para Mikel Rico del que espera que la afición le despida como se merece el vasco.