Xisco Muñoz rechaza de plano que lo que queda de campeonato valga de poco. Todo lo contrario. Le da una importancia capital. Por el club, por la afición y por los jugadores. Pero la realidad es que en la rueda de prensa para hablar del partido contra el Leganés del próximo lunes ha tardado en salir el nombre del equipo madrileño. Ha sido más un ‘déjà vu’ y una entrevista sobre la marcha del equipo, sobre la asimilación de conceptos, la mejora de los jugadores a nivel individual y como grupo, de cómo la pesada carga que pendía sobre ellos se ha ido aliviando semana tras semana, de la falta de algunos detalles… que sobre el Leganés.
Niega Xisco que le haya faltado carretera para conseguir el objetivo de colarse entre los equipos que buscarán el acceso vía ‘play-off’ y ha subrayado que “nada garantiza” conseguirlo cuando arranca la competición. Ya centrado en el próximo rival ha puesto el acento en que el objetivo del Huesca es que debe quedar lo más alto posible en la clasificación. Y eso pasa por ganar este lunes ante un Leganés que va a salir “como animales”, en un entrecomillado para hacer de la hipérbole una llamada de atención a que visualiza un partido en el que su once tendrá que salir a tope, y los jugadores que entren en los cambios, tendrán que rendir a tope sobre el campo.
El técnico del Huesca subrayó que quiere un partido tan sólido como el propuesto contra el Tenerife, aunque con un mayor acierto –“ser más agresivos”, dijo- de cara a la portería rival y deslizó que quizá a su equipo, en algún momento, careció de la “ambición” necesaria en mmás de un encuentro.