El Bada Huesca recibe este sábado (19.00) al Teucro gallego que tiene su portería resguardada por el ex BM Huesca Jorge Lloria, y Santana, que mantiene vivo el recuerdo la semifinal del ascenso a la Asobal.
En la portería del Teucro que este sábado se enfrenta al Bada Huesca (19.00) en el Palacio de los Deportes habrá un trozo de historia de aquella fase de ascenso a la Asobal. El ying y el yang. García Lloria y Santana. El primero defendía los intereses del BM Huesca de por aquél entonces, Santana el de un Pilotes que caía en semifinales contra el Bada en un partido donde el enfado del portero del siete gallego fue monumental. Y la brasa de aquél fuego aún permanece. Lloria deslizó tras el entreno del 40×20 gallego en la pista altoaragonesa que Santana lo tiene grabado en su memoria.
García Lloria dejó muy buen hacer en Huesca. Mantiene amigos aquí. La distancia no ha tumbado esa buena relación con Marco Mira y con el hoy directivo Dani Ibáñez. Con el primero compartió piso. Esta tarde se han visto. Saludos de rigor, abrazos y muy buena sintonía. Desde el punto de vista deportivo, sensaciones agridulces en el palacio. Sí, Lloria logró un ascenso a la Asobal, pero también un descenso cuando defendía la portería del Octavio, y en la última jornada. “Estuve tres temporadas en dos etapas y siempre me sentí cómodo aquí”, recuerda. Firma su segunda campaña en Teucro. Está contento y subraya que el objetivo no es otro que el de la “permanencia, consolidar el equipo en la Asobal”.
La clasificación aloja a Teucro con cinco puntos, uno más que el Bada Huesca. Ha perdido de uno contra rivales de la talla de Granollers y Anaita por lo que la tarjeta de presentación para este sábado es más que buena. “Estamos contentos porque competimos contra buenos equipos. Siendo recién ascendidos no nos va a ser fácil ganar ningún partido en esta categoría”, dice Lloria.
Teucro llegó este viernes tras un largo viaje. Con el de Puente Genil, uno de los más complicados del calendario por aquello de las comunicaciones. Han soltado músculos sobre la pista del Palacio. Un descanso activo. Y una duda. No se vio sobre el 40×20 a uno de sus jugadores de referencia como es el lateral izquierdo cubano Yoan Balázquez. Su técnico, Quique Domínguez, tampoco dio pista alguna. Tan solo se refirió a las bajas de Medina y de Óscar Silva.
Si el técnico gallego echó flores al juego del Bada Huesca, particularizó las mismas en Carró, con el que ha compartido varias temporadas, y deslizó, entre risas, que lo encuentra “nervioso”. “La verdad es que está con ganas. Se le ha hecho la semana larga, no le llega el día. Me llevo muy bien con él. Querrá hacerlo muy bien, como todos, pero a veces cuando tienes tantas ganas se te vuelve en contra”, señala en una mezcla de razón y deseo.
Bada llega al partido tras perder los dos últimos cuando dominaba el marcador. Los últimos minutos le pasaron factura contra Guadalajara y Anaitasuna. Para el de este sábado, Nolasco recupera a Dijà y Bonanno a plenitud lo que supone mejorar sensiblemente las rotaciones. Además, Marco Mira entrenó este viernes por lo que podría entrar en la convocatoria tras no estar contra Anaitasuna por un esguince en un tobillo. Nolasco advierte sobre el Teucro el importante “equilibrio” de su siete, la calidad de muchos de sus jugadores y la potencia de lanzamiento del joven cubano Yoan Belázquez… si finalmente está.
