El Real Zaragoza afronta una nueva temporada con las dudas sobrevolando el futuro próximo del club. Tras un mal arranque de campaña en lo que a resultados se refiere, con 2 puntos de 12 posibles, Miguel Torrecilla y Raúl Sanllehí han salido a dar explicaciones acerca de su modus operandi en el mercado estival de fichajes. Los directivos del club maño han mostrado cierto aplomo a la hora de ofrecer su punto de vista sobre las operaciones realizadas. De hecho, el director general del elenco blanquillo ha decidido no poner límite a las preguntas de los periodistas congregados en la sala de prensa de La Romareda. Esto ha hecho que la comparecencia durase más de lo estimado. Hasta cerca de una hora y diez minutos han estado Sanllehí y Torrecilla dando explicaciones sobre el mercado.
Y lo cierto es que tanto uno como otro están contentos con los resultados llevados a cabo. Un total de 23 operaciones que parecen escasas dada la composición de la plantilla pero que dejan satisfechos a los encargados de confeccionar la plantilla. El tándem Raúl Sanllehí-Miguel Torrecilla se ha convertido ya en una pareja de hecho, con sus piques y sus riñas. Pese a todo, van a una y tienen confianza plena en el otro, aunque de cara al público sus gestos se vean forzados y poco sinceros. El tono que han decidido acoger, impulsados por un gran trabajo comunicativo que viene planificado, hace mucho más cercana cualquier declaración que producen los representantes.
Estrategia definida: sinergias y rigor
‘Charly’ Cuartero y Raúl Sanllehí, la nueva y la ex
Nuevo proyecto de club y nueva manera de proceder
Raúl Sanllehí ha acaparado la mayor parte de los focos en la comparecencia. Es notorio que es el principal eje del proyecto y se ha detenido a explicar cuál va a ser su manera de proceder. El encargado de estimar, valorar y detallar las relaciones contractuales con los futbolistas ha dado un giro de timón en ese aspecto. Para reducir -a priori- la carga salarial del Real Zaragoza, desde su llegada intentaron “cambiar el sistema retributivo de la plantilla”. “Todo club tiene un objetivo. En el caso del Zaragoza, el ascenso“, aseguraba el director general. Así, ha implementado un nuevo modelo que ya ejecutó en Barcelona y en el Arsenal. Le ha propuesto a la plantilla una reducción salarial que se ve compensada por objetivos. “Así hemos cerrado las renovaciones y las nuevas llegadas. Me pareció de justicia, como club, ofrecerles esa posibilidad para toda la plantilla. Les dimos la opción pero nunca fue una petición ni una necesidad del club. Estamos satisfechos y respetamos a los que no han querido hacerlo”, informaba, añadiendo que un gran porcentaje de los jugadores, sobre todo los titulares, han aceptado. El club les da 4 si ellos aceptan darle 1 al club.
En otro orden de cosas, Sanllehí ha asegurado que “en breves tendremos buenas noticias en lo que concierne a las renovaciones”, dejando caer que Sergio Bermejo y Alejandro Francés prolongarán su contrato próximamente. Y lo harán siguiendo el modelo anteriormente mencionado. En el debe, la salida de Chavarría. Argumenta el director general que la presión del jugador por salir “era constante”. “Fui muy claro con él. Le dije: ‘por mucho que insistas no vas a salir porque te necesitamos para ir a Primera’. Yo era un abanderado de no venderlo. Lo tuve en mi casa casi dos horas“, explicaba Raúl Sanllehí. Aún así, llegó un momento que la motivación personal acabó cambiando la opinión del catalán. “Le dije a Miguel: mírame lo que tenemos. Nunca fue una motivación económica, fue un tema humano. La oferta del Rayo fue muy superior a la inicial“, añadía.